La repercusión que generó el descargo público de Gimena Accardi, primero en el ciclo Sería Increíble de OLGA y luego en la improvisada conferencia de prensa que ofreció en la puerta del streaming, tuvo consecuencias inmediatas en la vida de la actriz. Según reveló Yanina Latorre en las últimas horas, la actriz decidió dar un paso atrás en el mundo digital para preservar su salud mental.
“Ella está enojada, está arrepentida de sus declaraciones. Vio la maroma de mensajes que recibió, las redes”, aseguró la conductora de Sálvese Quien Pueda (América TV). Y agregó con contundencia: “Gimena no se fue completamente de las redes, pero borró las aplicaciones de su teléfono porque todo esto es enloquecedor”.
La decisión de Accardi llegó después de jornadas agitadas, en las que se convirtió en el epicentro de la agenda mediática al reconocer, frente a miles de espectadores, que en sus 18 años de relación con Nicolás Vázquez había cometido una infidelidad.
Aunque la actriz aclaró que la pareja ya estaba en crisis y que la traición fue apenas “la gota que rebalsó el vaso” de una ruptura que venía gestándose, la revelación desató una catarata de comentarios, críticas y especulaciones.
“Lo hice por mi salud mental”
Este martes al mediodía, frente a los micrófonos de distintos medios que la esperaban en la puerta del estudio de OLGA, Gimena explicó el motivo que la llevó a alejarse de las redes. Con la voz quebrada y un tono de preocupación, dijo: “El hostigamiento en redes es algo que venimos sufriendo desde hace mucho tiempo. Yo cerré todo, no estoy leyendo nada porque no quiero llegar al punto de pensar en suicidarme. Es demasiado el odio, demasiado el hostigamiento”.
En esa misma línea, la actriz y expareja del famoso actor, productor y conductor televisivo fue categórica sobre su decisión: “Las cerré, no las leo y no sé qué está pasando. Lo hice por mi salud mental”.
Estas declaraciones encendieron las alarmas sobre el nivel de presión que enfrentan las figuras públicas cuando su vida privada se convierte en tema de debate social. Gimena, que durante casi dos décadas fue parte de una de las parejas más queridas del espectáculo argentino, se encontró de un día para el otro en el ojo de la tormenta.
El peso de la exposición
El gesto de Accardi de “borrar temporalmente las redes de su celular” no solo habla de su necesidad de resguardo personal, sino también del impacto que generan las redes en la vida de los famosos. En tiempos en los que cada paso, gesto o palabra es replicado, analizado y juzgado al instante, las consecuencias emocionales pueden ser devastadoras.
Mientras tanto, tanto ella como Nicolás Vázquez insisten en que su relación terminó en buenos términos y que el vínculo de respeto y cariño sigue intacto. Sin embargo, el acoso digital y la presión mediática parecen haber sido un límite imposible de sostener para la actriz, quien eligió priorizar su bienestar antes que seguir conectada.
