La Escuela América Latina de Villa Lavalle se encuentra en el centro de la polémica desde hace varios días tras una serie de denuncias por maltrato laboral y favoritismo, que han generado un clima de tensión dentro de la institución.
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La Escuela América Latina de Villa Lavalle se encuentra en el centro de la polémica desde hace varios días tras una serie de denuncias por maltrato laboral y favoritismo, que han generado un clima de tensión dentro de la institución.
Primero fue Beatriz Quipildor, vicedirectora de la escuela, quien confirmó a El Tribuno la existencia de «problemas de convivencia» que escalaron hasta el punto de requerir la intervención del SAMEC, que debió trasladar a un miembro del personal en ambulancia.
Por otro lado, docentes de la institución, que prefieren mantener el anonimato por temor a represalias, denunciaron a través de una carta sentirse víctimas de persecución laboral. En el escrito también señalaron irregularidades en la concesión del kiosco escolar, que estaría a cargo del esposo de la directora.
La situación también generó malestar entre algunos padres los padres de los alumnos, frente a la falta y la mala atención recibida en el establecimiento.
Investigación en curso
Ante la gravedad de las denuncias, el Ministerio de Educación designó a Graciela Cruz como supervisora, y fue quien realizó una visita a la institución y confirmó que se ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos. «Hemos recibido quejas sobre el entorno y las relaciones institucionales», señaló la supervisora en diálogo con El Tribuno, «es fundamental garantizar un ambiente de respeto y buen trato para todos».
La supervisora comentó que la invesigación está en proceso y en etapa de recepción de testimonios, que día a día se van incrementando.
La concesión del kiosko
También confirmó que se investiga la concesión del kiosco escolar, teniendo en cuenta que la institución no cuenta con un espacio para este tipo de actividades, por lo tanto expresó su sorpresa cuando durante la visita encontraron que estaba funcionando un kiosco en un espacio reducido. Además, fue categórica al afirmar: «Está prohibido que familiares manejen el kiosco».
Cruz sostuvo que se labrará un acta con los resultados de la investigación, que será elevada a la directora de nivel, este caso del secundario, y a la Secretaria de Gestión Educativa. «Ellos interpretarán la situación y tomarán una decisión». La supervisora sostuvo que el informe estaría terminado hasta el viernes.
