Donald Trump, el presidente de Estados Unidos, tiene un lazo oculto con la WWE, la compañía de lucha libre más grande del planeta. Este vínculo comenzó en los años 80 y 90, cuando la WWE eligió el Trump Plaza Hotel and Casino para llevar a cabo algunos de sus eventos más destacados. Lo que muchos desconocen es cómo este vínculo creció hasta convertirse en un factor clave en el auge de la WWE y en las apariciones públicas del magnate.
El desconocido vínculo entre Donald Trump y la WWE
El magnate, de vínculo con varias estrellas o entidades, en este caso con la WWE, consolidó la relación a partir de su relación con Linda McMahon. Trump eligió a McMahon para ocupar un cargo importante en su gabinete, lo que fortaleció su conexión con la lucha libre. Linda, exdirectora de la WWE, aportó su experiencia al gobierno de Estados Unidos, mientras su familia continuó al frente de la empresa.
El cruce entre Trump y Vince McMahon, cofundador de la WWE, se remonta a los años 80 y 90. Aunque no se sabe con certeza cómo nació su amistad, la relación se afianzó gracias a la televisión y, sorprendentemente, al ring. Trump no solo estuvo en el centro de atención, sino que también se convirtió en una figura recurrente en los eventos más importantes de la WWE.
Los eventos Wrestlemania IV (1989) y V (1990) se llevaron a cabo en el Trump Plaza Hotel and Casino, un símbolo de la colaboración entre el magnate y la compañía. Estos shows fueron beneficiosos para ambos: la WWE tuvo acceso a un escenario de prestigio, mientras que Trump se promocionó ante una audiencia global, consolidando su imagen mediática.
Las apariciones de Donald Trump en la WWE
Donald Trump dejó una huella importante en la WWE. A lo largo de los años, su presencia en los eventos más importantes de la lucha libre contribuyó a fortalecer su vínculo con la WWE y con la familia McMahon. Aquí están algunas de sus apariciones más notables:
- Wrestlemania 23 (2007): Participó en «La Batalla de los Billonarios», donde Bobby Lashley luchó por él contra Umaga, en una pelea que tenía como premio la cabellera del perdedor.
- WWE RAW (2009): Anunció que compraba el programa insignia de la WWE, aunque fue una historia ficticia que tuvo repercusiones negativas en las acciones de la empresa.
- Salón de la Fama de la WWE (2013): Fue inducido al Salón de la Fama, con Vince McMahon como el encargado de hacerle el reconocimiento.
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