En dos resoluciones que se conocieron este miércoles, el juez Daniel Rafecas desestimó dos denuncias penales que el presidente Javier Milei había formulado contra los periodistas Carlos Pagni y Ari Lijalad.
Milei había denunciado a los periodistas por calumnias e injurias, un delito que, según el juez, no existió en este caso. Rafecas destacó, además, que el trabajo periodístico está protegido por la libertad de prensa que consagran los acuerdos internacionales incorporados a la Constitución nacional.
Milei había acusado a Pagni de comparar a su gobierno con el régimen nazi de Adolf Hitler, algo que, según el juez y según surge de la visión del programa al que se refirió el Presidente, nunca sucedió. Allí, Pagni hizo un análisis general de la llegada de Hitler al poder en la Alemania de la década del ’30 del siglo pasado, pero no lo comparó con la llegada de Milei a la Casa Rosada.
En el caso de Lijalad, Rafecas consideró algo parecido, y estimó que no había calumniado al Presidente como sostenía la denuncia.
La síntesis del fallo «Pagni»
En el caso de la denuncia presentada por Milei contra Pagni era un reclamo por presuntas calumnias e injurias, Rafecas consideró que no se cometió ningún delito y que las expresiones del periodista están protegidas por la libertad de prensa.
Sobre los dichos de Pagni, Rafecas explicó en el fallo que se trató «de un análisis político general sobre la fragmentación del sistema democrático y no implicaban imputación alguna concreta ni injuriosa hacia el Presidente».
Además, Rafecas remarcó que «el artículo periodístico no atribuía delitos, ni deshonraba intencionalmente a Milei, y que sus dichos estaban enmarcados dentro del ejercicio legítimo de la libertad de expresión y de prensa».
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