Este lunes por la noche, el exjefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, participó de una entrevista en el programa televisivo del periodista Carlos Pagni en el que ratificó su candidatura para las próximas elecciones legislativas en la Ciudad de Buenos Aires.
En ese marco, aseguró que “la Ciudad está mal”, “descuidada”, “sucia” e incluso sostuvo que “tiene olor a pis”, según los dichos de los vecinos con los que se reunió. Las críticas, desde luego, apuntan a la gestión de Jorge Macri y marcan una ruptura con el PRO.
Pero para Darío Lopérfido, el principal responsable de esa situación y de varias otras problemáticas porteñas es el propio Rodríguez Larreta. En su habitual espacio de los miércoles en Newsweek Argentina, el intelectual argentino lo señala por haber puesto toda su energía y los recursos públicos para financiar una fallida campaña presidencial.
La otra semana, por Darío Lopérfido: Larreta y los Moyano, una trama de basura y mafias
UN PERONISTA AL DESNUDO
El análisis de Darío Lopérfido, desde España
Para el exsecretario de Cultura argentino y actual coordinador de la Cátedra Vargas Llosa, “cuando pensamos que la Argentina política no podía caer más bajo, aparece Larreta en campaña diciendo que vuelve porque la Ciudad ‘está sucia y hay olor a pis’”. Y comentó: “Todo sucedió en un anuncio de que va a ser candidato a legislador luego de que se pasó años leyendo encuestas falsas que le decían que iba a ser presidente”.
De acuerdo a su visión, “no hay una sola cosa en el anuncio que no esté mal”.
“La Ciudad está como está, entre otras cosas, por su responsabilidad. Larreta fue 8 años jefe de Gabinete de Macri y 8 años jefe de Gobierno, y lo fue hasta hace poco más de un año. Con lo cual, con esa declaración se autoinculpa. Máxime cuando al irse hizo acuerdos y dejó gente en cargos. La más notable es la actual vicejefa de Gobierno, Clara Muzzio, que era larretista en la época en que se rompían veredas sanas para volver a hacerlas”, subrayó.
En ese sentido, Lopérfido insistió en que “Larreta culpa a los demás por sus propios errores”, y detalló: “Durante su campaña apoyó a Lousteau para jefe de Gobierno. Le entregó muchísimos cargos, entre ellos, el Ministerio de Desarrollo Económico, que era una caja enorme para su campaña. Él creía que con el apoyo de los radicales se aseguraba la presidencia. Convirtió a Lousteau en un Filmus crónico. No hizo ningún cálculo bien y desperfiló al PRO, que era un partido de centro-derecha con Macri en la Ciudad y lo convirtió en una mezcla espantosa de peronistas, radicales, socialistas, todo condimentado con lenguaje inclusivo y un wokismo ridículo. Y durante la pandemia fue comparsa triste del inenarrable Alberto Fernández”.
Y continuó: “Todo ese desastre, para dedicarse a una campaña presidencial infinita en la cual dilapidó monumentales cantidades de fondos públicos. Regó los medios de comunicación de pauta de la ciudad y se rodeó de gente que le sacaba dinero y le decía que iba ganando. No había ninguna chance de que Larreta fuera presidente: los vientos iban para otro lado, pero el hombre estaba tan rodeado de obsecuentes y vivillos que no se enteró de la verdad hasta la noche de las PASO”.
“Que un outsider como Milei sea presidente es el resultado de políticos mediocres que creen que el poder se compra y que no saben leer hacia dónde va la gente. Ahora hace un gran anuncio para ser candidato a concejal haciendo campaña contra sí mismo y contra sus exsubordinados”, analizó.
Finalmente, y a modo de conclusión, Lopérfido sentenció: “La Argentina peronista está llena de tipos como Larreta, que creen que ser políticamente correctos siempre y usar prácticas clientelistas es lo necesario para tener poder. Por esa gente, entre otras cosas, Milei es presidente”.