Las provincias patagónicas de Neuquén, Río Negro, Chubut y Santa Cruz se destacan en el último Ranking de Eficacia Político-Criminal de los Ministerios Públicos Fiscales, elaborado por el INECIP con datos de 2023. Neuquén ocupa el tercer lugar a nivel nacional, con una tasa del 13,08%, seguida de Río Negro en el cuarto puesto con el 12,09%. Chubut y Santa Cruz, aunque en posiciones más bajas, superan a jurisdicciones como Buenos Aires o CABA, con tasas del 5,53% y 3,85%, respectivamente.
Este indicador mide la capacidad de las fiscalías para ofrecer respuestas de calidad —como condenas, suspensiones de juicio a prueba o acuerdos reparatorios— frente a los casos penales que ingresan. Sin embargo, detrás de estos porcentajes se esconde una realidad preocupante: en todas estas provincias, más del 80% de los casos no reciben ninguna solución sustancial, lo que refleja una brecha significativa entre la gestión real y las expectativas de justicia.
Neuquén, por ejemplo, registró 46.714 casos ingresados, de los cuales solo 6.192 obtuvieron una respuesta de calidad. Río Negro, con 40.842 casos, resolvió de manera efectiva 4.939. Chubut y Santa Cruz, con volúmenes menores, también muestran dificultades para escalar en eficacia, a pesar de sus avances en transparencia y depuración de datos.
Un factor clave en el desempeño de la región ha sido la mejora en el registro de casos. Provincias como Neuquén y Chubut han ajustado sus metodologías para excluir ingresos que no constituyen delitos, lo que permite una medición más realista. Aun así, la planificación de la persecución penal sigue siendo un desafío pendiente en la mayoría de los distritos.
A nivel nacional, la Patagonia se consolida como una de las regiones con mejor rendimiento en justicia penal, aunque el informe del INECIP advierte que ningún ministerio público supera el 20% de efectividad. La falta de respuestas para la mayoría de las víctimas sigue siendo una deuda que exige mayor planificación, recursos y voluntad política.
