Desde muy temprano, todo el arco político argentino se abocó exclusivamente a enviar sus sentidos mensajes de despedida a Francisco. Expresidentes, gobernadores, legisladores y referentes gremiales y sociales inundaron las redes sociales con su pesar por el fallecimiento del Papa. Cristina Kirchner manifestó su «tristeza infinita» y lo definió como el «rostro de una Iglesia más humana»; mientras que Mauricio Macri recordó el último encuentro que mantuvieron en el Vaticano. Axel Kicillof remarcó que el sumo pontífice «predicó siempre por una economía al servicio de los que más necesitan» y Jorge Macri lo describió como «un porteño que trascendió fronteras y llevó su mensaje de paz, justicia y humildad».
«Te vamos a extrañar Francisco, la tristeza que tenemos es infinita», escribió Cristina Kirchner y compartió una serie de fotos de su primera visita a la Santa Sede cuando ella transitaba el anteúltimo año de su segundo mandato y Bergoglio llevaba días como jefe de la Iglesia Católica. Sobre aquella reunión contó una breve anécdota respecto al intercambio que mantuvieron. «La primera vez que estuve con Francisco en marzo del 2013 le dije que, como a Megafón, lo esperaban batallas celestiales. Se rió mucho y me dijo: ‘Es mi libro preferido, me encanta Marechal’. Coincidimos en que Megafón, o la guerra, emblemática literatura de Leopoldo Marechal, era una de nuestras novelas preferidas», reseñó la expresidenta, que eligió la coincidencia de ambos en aquel novelista y ensayista peronista para despedirlo.
Macri, por su parte, afirmó que fue «un honor conocerlo», que «merecerá para siempre admiración y respeto» y recordó una anécdota sobre la última charla que tuvieron. «Me acompañaron Juliana, Agustina, Valentina y Antonia, que en ese momento tenía 5 años. Cuando Antonia vio a Francisco, empezó a hacerle preguntas sin parar. Francisco las contestó todas: ‘¿Cuántos años tenés? ¿Qué comés a la noche? ¿Vos tenés mamá y papá como yo?’ Y la más graciosa de todas: ‘¿Dormís con esa ropa?’ Francisco estaba divertido y fue muy cariñoso mientras respondía», contó.
Los emotivos mensajes de despedida también llegaron de parte de los gobernadores. El bonaerense Axel Kiciillof afirmó que el sumo pontífice «se convirtió en referencia de los que luchan por la justicia social en todo el planeta» y señaló que «mientras muchos exaltan el egoísmo», el Papa predicó siempre «por una economía al servicio de los que más necesitan». «La partida de Francisco deja un vacío enorme, pero su mensaje a favor de la paz queda en los corazones de millones de cristianos y no cristianos», subrayó. En la misa en su homenaje que se realizó en la Catedral Metropolitana, el jefe de Gobierno Jorge Macri destacó que el legado de Francisco «es de humildad y compromiso». «Siempre nos pidió estar cerca de los que más sufren, fue un Papa sin pompa, sin lujo, dedicado a la gente que ha sufrido toda su vida», agregó y dijo que fue un «porteño que trascendió como nadie los límites de la Ciudad».
El cordobés Martín Llaryora sostuvo que se fue «un líder mundial que, en tiempos difíciles, se animó a remar contra la corriente y a impulsar transformaciones profundas» y lo calificó como «un pastor que, frente al avance del individualismo, propuso una Iglesia con “olor a oveja”, comprometida con quienes menos tienen y más necesitan». El santafesino Maximiliano Pullaro indicó que «Francisco será siempre un orgullo argentino» y que le deja a la humanidad «un legado inolvidable e inspirador en la búsqueda de la paz, la igualdad y el compromiso con los que padecen las injusticias de este mundo». Y el mendocino Alfredo Cornejo comentó que “tuvo un papel relevante en la historia reciente de Argentina y el mundo” y que “su figura dejó una marca en distintos ámbitos y generaciones”.
Para el excandidato presidencial Sergio Massa, Francisco «fue mucho más que un Papa: fue la voz de los que no tienen voz»; mientras que la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió lamentó su muerte, con un emotivo mensaje donde destacó que el domingo dio la bendición de Pascua de Resurrección. «Dios te tenga en la gloria». «Hasta siempre querido amigo, descansa en paz», publicó. El exalcalde porteño Horacio Rodríguez Larreta dijo que Bergoglio seguirá «aquí con todos nosotros con su sonrisa generosa, su sabiduría y su compromiso permanente con los pobres y los humildes».
Referentes del oficialismo y la oposición en el Congreso también hicieron llegar sus condolencias: el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem; los jefes de los bloques del PRO Cristian Ritondo; de Unión por la Patria (UxP), Germán Martinez; de la UCR, Rodrigo de Loredo, y de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, y el diputado y ex embajador en el Vaticano Eduardo Valdés.
El libertario Martín Menem desempolvó la agenda antiderechos y aseguró que en honor a Francisco seguirá «defendiendo la vida desde su concepción». El jefe del principal bloque opositor, Germán Martínez, expresó que el Papa «tuvo un pontificado absolutamente renovador, para adentro y para afuera de la Iglesia. Fue un verdadero bastión del Humanismo». «Militó hasta el último día por la Paz. Gran tristeza. Pero con la esperanza de que otros cosecharán lo que Francisco sembró», subrayó. Ritondo se sumó y definió a Bergoglio como «cercano, valiente, humano y argentino. Nos enseñó que la fe se vive con gestos, no con discursos», añadió. En tanto, el diputado Valdes remarcó que «va a quedar en la historia de los grandes, como Juan XXIII» y resaltó que transformó a una Iglesia «que venía aburguesada y muy eurocéntrica, y él la abrió a todas las latitudes, porque la mayor feligresía está fuera de Europa».
A su vez, el radical Rodrigo De Loredo puntualizó que «Francisco trascendió nuestro país para ejercer desde el mayor lugar que un católico puede hacerlo un papado por la paz y la dignidad» y el jefe de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, sumó que fue «un Papa que se reconoció pecador, un humilde en las formas que registró su ambición de poder y seguramente luchó contra ella». Asimismo, la diputada de la Coalición Cívica Paula Oliveto le deseó que «Dios lo reciba en su Gloria».
Desde el mundo gremial, la CGT prometió que el legado de Francisco «no se apaga». «Enciende la llama de quienes creemos que un mundo más justo es posible. Un mundo donde la solidaridad no es un acto de generosidad, sino de justicia», afirmó a través de un comunicado. En tanto, el cotitular de la central obrera Héctor Daer añadió que «su legado de amor, justicia y esperanza quedará grabado para siempre en nuestros corazones». En el mismo tono, la CTA le brindó su adiós «al profeta de los pobres”. «En este momento de crisis económica sin precedentes en nuestro país, es fundamental honrar su legado de compasión y lucha por la justicia social», sentenció.
El referente de la UTEP Juan Grabois, muy cercano a Francisco, pidió que sea recordado como «un buen tipo», y que la sociedad asuma la misión que nos señaló: «cuiden a los pobres». El titular del partido Patria Grande utilizó palabras del propio Bergoglio en una entrevista que le concedió al diario español La Vanguardia, en 2014, en la que ante la pregunta de «¿cómo le gustaría ser recordado?», respondió: «Era un buen tipo, hizo lo que pudo, no fue tan malo». La exembajadora argentina en la ONU y amiga de Francisco, Marita Perceval enunció que con la muerte del Papa «llora el alma de los descartables, tiembla el corazón de los humillados, gime el aliento de los oprimidos…» y completo: «los justos del mundo no cerrarán los ojos». Sergio Maldonado le agradeció a Francisco haberlo acompañado a él y a su madre en el «pedido de Verdad y Justicia» por su hermano Santiago Maldonado.
Por último, la Corte Suprema expresó su pesar por la muerte del Papa, pero determinó que no se suspenderán sus actividades oficiales. «El Tribunal expresa el duelo que provoca su fallecimiento y así lo declara, sin cese de actividades oficiales», indicó el máximo tribunal la acordada firmada por los ministros. Además de expresar «el duelo del Poder Judicial de la Nación», la Corte dispuso que la bandera nacional permanecerá izada a media asta en todos sus edificios por el plazo de siete días, en consonancia con el Poder Ejecutivo.
Colectiva Feminista
En paralelo a los mensajes de la dirigencia política, también llegó la despedida de la Colectiva Feminista Federal por la Democracia y los Derechos Humanos. En un comunicado le dijeron adiós al Papa que afirma que «no estamos condenados a repetir ni a construir futuro basado en la exclusión y la desigualdad; que denuncia la cultura del privilegio, la explotación y la indiferencia; que dice que es un desafío urgente proteger nuestra casa común; que convoca a indignarse ante las injusticias y a que se nos estremezcan las entrañas frente a la opresión; que exige que se investiguen todos los genocidios porque todas las naciones tienen derecho a existir en paz y seguridad y sus territorios no deben ser atacados ni invadidos; que asegura que los seres humanos, capaces de hacer lo peor, también son capaces de elegir lo que es bueno y volver a empezar». Así despidió al Papa y resaltó que tuvo «el coraje de preguntarse ‘¿quién soy yo para juzgarlos?’ y al hombre que en una plaza colmada de personas, abrazó a Milagros, la joven de Santiago del Estero, cuando le entregara ‘nuestro’ pañuelo verde». «El mundo estará más solo sin Francisco. Y nosotras seguiremos haciendo lío», concluyeron.