Escenario
Con ilusión y entusiasmo, seguidores de Ricardo Arjona celebran el inicio de la residencia Lo que el Seco no dijo, un espectáculo que esperan quede en la memoria del país.


Ricardo Arjona promociona la gira «Lo que el SECO no dijo» que se expandirá por América. (Foto Prensa Libre: Cortesía Metamorfosis)
Ricardo Arjona ha conmovido a sus fanáticos con el inicio de su residencia en Guatemala, Lo que el Seco no dijo, este 31 de octubre. Sus seguidores consideran que comenzar la gira en su tierra natal es un regalo para el país.
El Centro Cultural Miguel Ángel Asturias se convirtió en el punto de encuentro entre el artista y miles de seguidores que lo acompañarán en 23 conciertos programados.
Horas antes del inicio, fanáticos expresaron sus emociones y expectativas. Luis Cifuentes compartió su alegría por volver a ver a Arjona en el Teatro Nacional, después de tantos años: “Volver a verte es un sueño cumplido. ¡Bienvenido a tu residencia en Guatemala!”, dijo.
Yoselin, otra de sus seguidoras, aseguró que esta residencia “es un regalo al corazón”, ya que “sus canciones son una curita para el alma”. Agregó que este es un momento histórico, pues Arjona eligió iniciar su gira desde el país que lo vio nacer.
LECTURAS RELACIONADAS
La Chiquis, integrante de la Arjona Pandilla —club de fans oficial del artista en Guatemala—, afirmó que esta residencia representa “vivir un sueño hecho realidad, desde su país”.
Beatriz Castro expresó su felicidad por saber que el artista eligió a Guatemala para iniciar esta nueva etapa: “Eso demuestra que sigue amando y poniendo en primer lugar a su país. Esta gira representa una nueva oportunidad para verlo, para ser la ‘señora de las cuatro décadas’ y para reencontrarme con amigos, tanto de la Pandilla guatemalteca como de otros países”, compartió.
Iris, también miembro de la Pandilla, dijo que espera que este espectáculo, que comienza en casa del artista, sea tan especial que “nunca se quiera ir”.
De nuevo, Yoselin compartió que la música de Arjona tiene un gran significado para ella, pues “cada letra contiene una historia: a veces la de alguien más, y otras, la mía”.
Alejandro, otro de los seguidores, destacó: “La residencia es música, baile, canto por muchos días, con sentimientos encontrados, canciones de antaño y canciones nuevas”.
Marcela también expresó su emoción por asistir al concierto, ya que es la primera vez que lo hace sin su mamá: “Quiero cantar, aplaudir y gritar el doble, para que desde el cielo nos escuche”, dijo conmovida.





