Camila Homs y José «el Principito» Sosa viajaron en los últimos días a Estados Unidos, más precisamente a los parques temáticos de Orlando, para vivir unos días de ensueño, consolidando su amor y, lo que es aún más importante, la armonía de sus familias ensambladas.
A través de sus redes, la famosa modelo y el futbolista compartieron con sus fanáticos los mejores momentos de esta aventura cargada de risas y emoción junto a todos sus hijos: los dos que Cami tuvo con Rodrigo De Paul, Francesca (5) y Bautista (4); y las mellizas de 10 años, Rufina y Alfonsina, que José tuvo con su ex, Carolina Alurralde.
Lo cierto es que en una de las imágenes que Cami compartió en su cuenta de Instagram se pueden ver a sus dos chiquitos posando risueños con un fondo que remite a las imponentes estructuras rocosas y misteriosas de los parques de Universal.

En esa tierna postal de los hermanos De Paul, Francesca luce su pelo largo con una musculosa y un short deportivo blanco, proyectando una imagen de comodidad y estilo ideal para recorrar las atracciones de semejante lugar. A su lado aparece Bautista con una sonrisa pícara, vistiendo una remera de fútbol del Barcelona, mitad azul y mitad roja.
Camila también compartió en sus redes una selfie con sus hijos, esta vez con un primer plano resaltando sus divertidas expresiones. Es que los tres posaban con un gesto de pura complicidad, haciendo «trompita» para la cámara, un clásico de las fotos familiares en la era digital.

Tal como muchos saben y la propia modelo mostró en sus publicaciones, la aventura en Universal Studios no solo es para los más pequeños. Es por ello que Homs y Sosa también se permitieron divertir en los juegos que allí había.
En una de las historias, de hecho, ella subió una postal en blanco y negro junto a su novio y escribió: «Nos ganaron 4 pibitos», dejando entrever una «derrota» de ellos dos en algún juego o competencia con sus hijos.

A juzgar por los posteos, las vacaciones de Camila y el Principito son un claro ejemplo de cómo las familias ensambladas pueden prosperar en un ambiente de amor, respeto y diversión. La presencia de los hijos de ambos, la complicidad en cada foto y la elección de un destino tan mágico como los parques de Orlando, refuerzan la idea de que los tortolitos están construyendo un presente sólido y un futuro prometedor para sus descendientes.
