Redacción El País
Es uno de los rostros más populares de Canal 12. Está en televisión, teatro, radio, streaming, y brilla también en Carnaval. Sin embargo, estos días se notó su ausencia tanto en La mesa de los galanes (Del Sol) como en el streaming Mucho, que conduce junto a Germán Medina y Noelia Etchverry.
El motivo no es preocupante, todo lo contrario: se tomó unas merecidas vacaciones y está disfrutando de un viaje por Europa, muy bien acompañado.
El comediante —que conduce Caraduras los domingos a la noche por Teledoce y es uno de los humoristas de La culpa es de Colón— viajó junto a su novia Jessica Bardanca, una gestora cultural y docente con la que está en pareja desde hace varios años.
Las primeras fotos de este viaje llegaron desde Londres, donde se mostraron enamorados y relajados, posando frente al Puente de la Torre, el Big Ben y con el Río Támesis de fondo.
El humor no faltó: él se fotografió dentro de una de las clásicas cabinas rojas británicas con su estilo descontracturado y gracioso. Pero entre tantas postales de película, también hubo un momento difícil que quedó registrado en video y se viralizó entre sus seguidores.
Entre los comentarios, resaltó uno de Paola Bianco, su amiga y compañera de La guionista del presidente, la comedia que estrenan el jueves 19 de junio en el Teatro del Anglo, donde también comparten elenco con Juan Gamero. «No te veo el libro, ¿lo escondiste?», le escribió con ironía la actriz.
El paseo de Pacella que salió mal

Foto: redes sociales
La escena en cuestión, que generó la reacción de más de 2500 seguidores, ocurrió durante el ascenso al London Eye, la famosa noria de 135 metros de altura que ofrece una vista panorámica de la capital inglesa. Pese a ser una de las atracciones turísticas más visitadas de Reino Unido, el paseo no fue disfrutable para el humorista: sufre de vértigo y lo pasó bastante mal en las alturas.
“Subir al London Eye con vértigo sale mal”, escribió su pareja en una historia de Instagram, en la que se lo ve nervioso, aferrado a un banco e incómodo. “No me he podido soltar”, admitía él, aferrado a un banco, con una mezcla de humor y nervios.
En otro momento, intentó pararse para mirar hacia afuera pero se arrepintió en el acto: “Pah, no, no”, se lo escucha decir en el video. Finalmente logró disfrutar un poco de la vista, aunque a una prudente distancia de la baranda.
De regreso en tierra firme, retomó su clásico humor con un reel en el que decía: “Eso no se llama Big Ben, se llama Reina Isabel. Big Ben son las campanas. Y eso… es un ómnibus”, dijo entre risas, mientras sus acompañantes lo seguían a las risas.
En este viaje, además de su pareja, también lo acompañan amigos. El siguiente destino fue Málaga, desde donde por ahora han compartido menos material en redes.
El amor pese a la diferencia de edad

Este descanso llega en medio de un gran momento profesional para el humorista y director de Los Chobys que está repleto de actividad. Por eso, este paréntesis de descanso y amor fue más que merecido.
Sobre su pareja, con quien lleva más de diez años, habló en una reciente entrevista en Canal 5 donde admitió que al principio la diferencia de edad —él tiene 46 y ella 32— lo hacía dudar.
“Siempre metía el freno”, confesó en La Morán de noche. Pero un beso en un taxi fue el punto de quiebre: “Fue decisivo”, recordó. Desde entonces, comparten una relación sólida, construida en base a la confianza y el crecimiento conjunto.
“Jessi es la persona que se fue transformando en muchas relaciones. Fueron 10 años de cambios, pero la elijo todos los días”, dijo con emoción.