
Temperatura máxima y mínima, así como probabilidades de lluvia, esta es la predicción para las próximas horas de este sábado en Bahía de Banderas, México.
Durante el día la temperatura llegará a un máximo de 32 grados, la previsión de lluvia será del 71%, con una nubosidad del 98%, mientras que las ráfagas de viento serán de 22 kilómetros por hora.
En cuanto a los rayos UV se espera que lleguen a un nivel de hasta 5.
Para la noche, la temperatura alcanzará los 25 grados, mientras que la probabilidad de precipitación será de 25%, con una nubosidad del 68%, mientras que las ráfagas de viento llegarán a los 18 kilómetros por hora en la noche.

Bahía de Banderas es uno de los 20 municipios que conforman el estado de Nayarit y que se caracteriza por tener un clima cálido subhúmedo con temperaturas promedio anuales que rondan entre los 31.1 y los 27.8 grados.
El verano en esta región nayarita, particularmente entre los meses de junio a septiembre presenta fuertes lluvias; la precipitación media anual es de 1,159.2 mm, no obstante, el 90% de los días del año son soleados.
La falta de preparación ante fenómenos hidrometeorológicos representa un costo diario superior a los 25 millones de pesos para las empresas mexicanas, según datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS). Entre 2012 y 2024, se pagaron en promedio 7,591 millones de pesos anuales por siniestros relacionados con tormentas, lluvias intensas e inundaciones, un incremento del 91% respecto al periodo 2001–2012.
Este panorama refleja la creciente vulnerabilidad operativa y financiera de las compañías, especialmente durante la temporada de huracanes, que se extiende hasta el 30 de noviembre, de acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
El pronóstico para 2025 indica una alta actividad ciclónica, con la posible formación de entre 8 y 9 tormentas tropicales, 4 o 5 huracanes de categoría 1 o 2 y hasta 6 huracanes intensos, de categoría 3 o superior.
Ante este escenario, Eduardo Gutiérrez, Socio Director en Eikos, consultora especializada en seguros y administración de riesgos, recomienda reforzar tres pilares fundamentales: seguros adecuados, protocolos internos robustos y alianzas estratégicas predefinidas.
En cuanto a cobertura, Gutiérrez advierte que disponer de una póliza no garantiza protección suficiente; “Una póliza integral frente a fenómenos hidrometeorológicos debe contemplar al menos los siguientes elementos: cobertura por huracanes, tormentas, granizo, deslaves e inundaciones; protección frente a interrupción de actividades o pérdida de ingresos; daños a bienes en tránsito o en uso fuera de planta; gastos adicionales por reubicación temporal; remoción de escombros y limpieza; procesos preferenciales de atención de siniestros”, detalla el especialista.
Además, recomienda revisar periódicamente los valores asegurados y mantener actualizadas las ubicaciones de los activos.
Un Plan de Respuesta ante Tormentas (ERP) debe contemplar cinco etapas:
Planeación anual.
Preparación inicial y final.
Respuesta durante el evento.
Recuperación posterior, incluyendo simulacros.
Actualización constante de procedimientos.
Más allá de los seguros, los protocolos internos juegan un papel clave en la gestión de riesgos. Alicia Martínez, Subdirectora de Daños, Autos y Fianzas de Eikos, señala que “es de gran relevancia que los protocolos incluyan canales de comunicación seguros, asignación de responsables por área y mecanismos para documentar daños con el fin de facilitar la gestión con aseguradoras y reducir el impacto en la continuidad del negocio”.