¿Será que la política dictatorial de despolitizar el país, asumida por todas las instituciones y por nuestra escuela, nuestras familias, nuestro país, nos redime retrospectivamente de responsabilidad?, se pregunta Lina Meruane en una de sus primeras páginas de Señales de nosotros (2023), cuya versión en portugués presentó en la Feria del Libro de São Paulo.
En entrevista en un hotel de la capital paulista, la escritora chilena de origen palestino cuenta que escribió este ensayo biográfico de poco más de 60 folios para resolver un pequeño inconveniente biográfico, de pensar que su familia había estado en lo que ella consideraba que era el lado incorrecto de la historia en los albores del régimen militar impuesto por Augusto Pinochet en 1973.
Si bien este ejercicio de memoria devenido en libro no le sirvió para justificar nada, sí le permitió comprender que gran parte de la sociedad chilena respondió a sus miedos, y eso no los convertía necesariamente en malas personas.
Movidos por los afectos
Tenían miedo por la vida ellos mismos y sus familias. Y el miedo es un elemento muy importante de nuestra afectividad. Nosotros operamos políticamente movidos por nuestros afectos, reconoce.
Recuerda que, en particular en el período de posdictadura chilena, parecía que todos los escritores eran hijos de mártires de la dictadura o que habían ocupado posiciones de resistencia más heroicas, entonces comenzó a reflexionar sobre cómo había vivido ella ese momento de su niñez, en el que se mantuvo en una especie de sombra de la vida real, sin dimensión de lo que acontecía afuera de sus muros de ladrillo.

Teníamos las señales, los rumores, las cosas que se decían y se negaban, pero uno no tenía un lugar de interpretación para poner todas esas señales juntas y construir un relato, detalla Meruane (Santiago de Chile, 1970).
Y, a pesar de que deposita gran parte de la culpa en sus círculos íntimos y los lugares que frecuentaba –como su formación en un instituto privado de educación británica en donde cada lunes se cantaban los himnos de todas las Fuerzas Armadas– afirma que también antes este tipo de cosas se hacían y se ocultaban.
Hoy el poder está operando de una manera absolutamente ‘gore’
Para Meruane, una de las voces más resonantes de la literatura latinoamericana moderna, en el siglo pasado el poder actuaba en las sombras, sin dejar evidencia de sus crímenes.
Se hacía desaparecer, es decir, no había evidencia de lo que había sucedido con esos cuerpos. Si habían sido torturados, si habían sido degollados. Se los tiraba al mar, se los enterraba en fosas comunes. No estaba el relato para entender lo que estaba pasando, ejemplifica en referencia al modus operandi de las dictaduras latinoamericanas, que se caracterizaron por sus centros de detención clandestinos y por la utilización del término desaparecidos.
Mientras que hoy el poder está operando de una manera absolutamente gore, de una manera absolutamente espectacular, a la vista de todos.
Muy visible y muy impune
Y para explicar a qué se refiere al citar este subgénero cinematográfico que destaca por sus imágenes sangrientas sin censura, la autora hace referencia a los ataques de Israel al pueblo palestino, en los que todo ha sido muy visible y muy impune, como si hubiera una situación especial de privilegio en la que una nación, un país, una ideología, tiene el derecho de acabar con toda otra población y no sufrir ninguna consecuencia.
E incluso con la justificación de que suceden en defensa propia, y bajo la premisa de que la población palestina lo merece por ser quienes son.

Ese proceso de deshumanizar al otro y negar al otro como humano permite reinterpretar los hechos como hechos necesarios, como hechos positivos, no como hechos inmorales y antiéticos o criminales, describe.
La autora de Palestina en pedazos (2021) revela que estaba escribiendo una novela, pero que la aceleración del genocidio por parte de Israel la arrastró de vuelta a este terreno, que Meruane conoce muy bien.
En ese sentido, cuenta que probablemente a finales de este año estrenará en Chile un conjunto de artículos, crónicas y reflexiones sobre Palestina que se va a llamar Matarlo todo.
Con información de EFE.