La visita aún no está en la agenda del presidente Luiz Inácio Lula da Silva en su primer viaje a Argentina desde que Javier Milei asumió la presidencia del país, el 2 y 3 de julio. Pero fuentes oficiales brasileñas confirmaron que se espera que Lula visite a la expresidenta Cristina Kirchner, quien se encuentra bajo arresto domiciliario desde el miércoles en un departamento de Buenos Aires.
Cristina fue condenada a seis años de prisión por corrupción. Con la condena confirmada por la Corte Suprema de Justicia, la expresidenta sufrió su primera gran derrota legal. Para muchos, es el principio del fin del kirchnerismo. Para otros, incluido Lula, se trata de una persecución política de la que Cristina resurgirá fortalecida. El brasileño no abordó el fondo del caso, ni lo hará. Sería una intromisión en la justicia argentina, admitieron fuentes consultadas en Brasilia. Pero Lula mostró solidaridad con Cristina, lo que, en la práctica, significa apoyar la tesis de la persecución política.
Si Lula, como anticipó el congresista Paulo Pimenta, quien participó en una marcha de apoyo a Cristina el miércoles en Buenos Aires, visita a la expresidenta, la tensión entre los presidentes de Brasil y Argentina volverá a alcanzar niveles delicados. Fuentes brasileñas que confirman las intenciones de Lula recordaron que Milei estuvo ausente de una cumbre del Mercosur, para reunirse con el expresidente Jair Bolsonaro en Santa Catarina. “Milei no tiene la estatura moral para cuestionar una posible visita de Lula a Cristina”, afirman fuentes en Brasilia.
Para visitar a la exjefa de Estado, el presidente brasileño deberá presentar una solicitud ante los tribunales locales. Solo los familiares podrán entrar al apartamento donde Cristina se encuentra detenida. La solicitud de Lula aún no se ha presentado, confirmaron fuentes brasileñas.
La agenda del presidente incluye su llegada la noche del 2 de julio y su participación en la cumbre presidencial del Mercosur el día 3, cuando Brasil asumirá la presidencia temporal del bloque. Lula ni siquiera se quedará a almorzar en la capital argentina. Esa es la previsión hasta el momento.
Una posible visita a Cristina podría tener lugar la noche del 2 al 3, tras la conclusión de la cumbre. Sin embargo, no se ha confirmado oficialmente nada. ¿Qué impacto tendría esta posible visita en las relaciones bilaterales? En palabras de una fuente diplomática: “Si la idea es preservar la estabilidad alcanzada en los últimos meses, sería contraproducente”.
De hecho, en los últimos tiempos, Milei no ha atacado a Lula, ni Lula ha hecho declaraciones contra el gobierno argentino. Ambos gobiernos trabajaron juntos para sellar el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, que aún necesita la aprobación del bloque europeo. También se alcanzaron acuerdos dentro del Mercosur para flexibilizar el Arancel Externo Común (AEC) y poner fin a las amenazas de Milei de abandonar el bloque. Los diplomáticos de ambos países respiraron aliviados.
La detención de Cristina apenas unas semanas antes de la visita de Lula, y la probable visita del presidente a un líder político con el que mantiene un vínculo de amistad y apoyo, podrían, una vez más, causar turbulencias en la relación.
“Cuando Lula estaba en prisión, recibió la visita del expresidente Alberto Fernández y la solidaridad de peronistas y kirchneristas”, recordó una fuente en Brasilia. Hoy, recalcó la misma fuente, es hora de que Lula muestre solidaridad.
El pronóstico del tiempo en el Mercosur es de fuertes vientos a principios de julio.
Por Janaina Figueiredo de OGlobo/GDA
