Barcelona tendrá, en un plazo máximo en un año, un Consell de la Llengua Catalana, organismo de nueva creación que aglutinará a aquellas entidades que fomentan el uso de la lengua en la ciudad, así como los representantes políticos, con el fin de debatir y dibujar conjuntamente cómo tienen que ser las políticas públicas de incentivación del uso social del catalán en la ciudad, hoy en claro retroceso.
La iniciativa presentada por Esquerra Republicana ha sido aprobada hoy en la comisión de Derechos Sociales del Consistorio y ha contado con el apoyo del 85% de los concejales del Ayuntamiento y solo los votos en contra de Vox.
“Esquerra tiene un objetivo claro en este mandato: acabarlo con una verdadera política lingüística por parte del Ayuntamiento de Barcelona”, ha dicho el concejal republicano Jordi Castellana en la defensa de la propuesta. “Eso quiere decir liderazgo político, por eso insistimos en el comisionado de la Llengua (figura creada pero todavía sin un responsable asignado) y en la Oficina de la Llengua Catalana para desplegar las líneas políticas acordadas”.
ERC ha destacado que las medidas de fomento del uso social del catalán han de ir acompañadas de recursos. “Por eso hemos multiplicado por 2,5 las partidas para el catalán”, ha recordado el portavoz republicano.
Con la creación de este órgano consultivo, ERC se propone dotar el Ayuntamiento de un espacio de “cocreación y seguimiento de la política pública de fomento del uso social de la lengua”, conjuntamente con las entidades que trabajan en este ámbito, y también para desplegar territorialmente en distritos y barrios estas políticas.
El texto aprobado, previa transacción con el gobierno municipal, contempla este despliegue territorial con consejos a cada uno de los distritos.
