El 10 de diciembre de 2025, durante una conferencia de prensa en la Casa Rosada, el jefe de Gabinete Manuel Adorni repasó los primeros dos años de la presidencia de Javier Milei. Con tono contundente, describió al país que heredó como “tierra arrasada”: “inflación de más del 200 % anual, más de seis de cada diez niños bajo la línea de pobreza, un déficit del 15 % del PBI, piquetes y violencia en ciudades como Rosario”. Con esos antecedentes, lamentó la “herencia triste” dejada por la gestión anterior.
Adorni sostuvo que desde diciembre de 2023 la gestión se enfocó en tres mandatos esenciales: “pulverizar el déficit y la inflación; garantizar el orden público; y liberar al Estado del peso excesivo sobre los ciudadanos”.Según su diagnóstico, el resultado ya se refleja en un país que “volvió a ser tierra de estabilidad, crecimiento e inversiones”. Entre los logros que enumeró figuran —según su relato— la baja de la pobreza, la suba del salario mínimo de 300 a 1100 dólares, y la actualización de jubilaciones de acuerdo a la inflación medida por el organismo oficial.
En cuanto a política exterior y financiera, Adorni resaltó el reciente alineamiento con Estados Unidos e Israel, y destacó el “respaldo” que, según él, Argentina recibió desde Washington, lo que facilitaría nuevas inversiones y acuerdos internacionales.
De cara al futuro, el jefe de Gabinete sostuvo que la victoria electoral de octubre —con respaldo al bloque oficialista en el Congreso— consolidó el mandato reformista: “Por primera vez en un siglo, somos muchos más los que quieren dar vuelta la página que los que quieren aferrarse al pasado. Tenemos una oportunidad histórica y no la vamos a desaprovechar”, sentenció.

