14 C
Buenos Aires
jueves, octubre 30, 2025

Marcos Novaro: «Si no hay una alternativa distinta de Kicillof, los bonos argentinos seguirán sin valer nada»

Más Noticias

Cerca de la mtica Plaza Francia, pleno barrio de Recoleta, pero cuando la calle todava serva para la pelota, el socilogo Marcos Novaro creci en un hogar con biblioteca y sobremesa poltica. Hijo de un gerente industrial con credo desarrollista y de una psicoanalista, se form en esa oscilacin clsica de la clase media: curiosidad cultural y cautela. «Mi madre tena una mirada algo ms inclinada a la izquierda, aunque tampoco tanto. Era la tpica clase media que poda oscilar entre posiciones ms progresistas o ms conservadoras, segn las circunstancias», explica Novaro aEl Economista.

El Colegio Nacional de Buenos Aires —en plena dictadura— dej marcas en los primeros aos de sus estudios y tambin bro en los ltimos; luego lleg la Universidad de Buenos Aires (UBA), el escenario decisivo de su formacin.

En 1984, con el regreso de la democracia, entr a Sociologa. Terminara la carrera en 1988, con predileccin por la teora poltica. Fue una UBA efervescente, y recuerda en sus palabras: «Sociologa se reabri en 1984, con profesores que venan del exilio. Algunos con ideas de izquierda; otros, con una mirada ms autocrtica sobre lo que haba sido la poltica en los aos sesenta y setenta, quienes revisaban su pasado y reelaboraban su pensamiento desde el liberalismo poltico. Haba mucha discusin, y ese clima atravesaba los claustros.Fue una poca muy estimulante«.

El campo todava no estaba tan delimitado: las fronteras eran porosas. Se poda cursar Sociologa y, al mismo tiempo, ir tras preguntas que hoy quedaran del lado de la Ciencia Poltica.Novaro siempre habit las orillas del pensamiento.

Se doctor en Filosofa, con la direccin de Jorge Dotti —filsofo argentino y referente de la teora poltica— como faro. Antes y durante el recorrido de Novaro incluy estancias en Espaa e Italia durante los noventa —un ao en Madrid, un semestre en Italia—. Experiencias que consolidaron mtodo y forjaron marcos tericos.

Ya de vuelta, el oficio se torn ms histrico aunque sin abandonar la poltica: el reconocido historiador argentino Tulio Halpern Donghi les encarg a Novaro y a Vicente Palermo —importante politlogo y ensayista— los dos tomos finales de la coleccin de historia argentina de la editorialPaids. La convocatoria lleg tras su primer libro conjunto —Poltica y poder en el gobierno de Menem, publicado en 1996—, que llam la atencin de Halpern Donghi y deriv, ya a principios de los aos 2000, en el encargo de dos volmenes:La dictadura militar (1976-1983) yArgentina en el fin de siglo. Democracia, mercado y nacin (1983-2001).

Entre 2001 y 2002, Novaro y Palermo acordaron el plan de trabajo; desde all vinieron los viajes a Berkeley, Columbia y Georgetown y el acceso a los archivos desclasificados del Departamento de Estado y la CIA. Para esa poca, esos documentos empezaron a abrirse al pblico: cables diplomticos, informes de inteligencia y comunicaciones internas sobre la relacin de Estados Unidos con la Argentina durante la dictadura y la transicin democrtica. El primer volumen, en coautora con Vicente Palermo,La dictadura militar (1976-1983), se public en 2003.

En 2006, la beca Fulbright le permiti a Novaro profundizar esta pesquisa en Washington y Nueva York y sistematizar el uso de esos fondos; ese trabajo aliment el segundo volumenArgentina en el fin de siglo. Democracia, mercado y nacin (1983-2001), de autora individual, publicado en 2009. El acceso a esas fuentes norteamericanas habilit la reconstruccin con precisin de las percepciones y polticas de Washington hacia el pas en los aos setenta y ochenta; dio a su trabajo sobre historia reciente una dimensin internacional. La beca Guggenheim de 2008-2009 lleg poco despus y contribuy tambin al cierre del ciclo histrico que Halpern haba propuesto.

En paralelo, Novaro propuls el Archivo de Historia Oral de Argentina Contempornea —coleccin de entrevistas y testimonios sobre la poltica reciente, con sede institucional en el Instituto Gino Germani y acceso pblico, gran parte disponible enYouTube— y dio forma, junto a un equipo amplio, al Centro de Investigaciones Polticas (CIPOL) —un centro independiente encargado de administrar el Archivo. Novaro es tambin titular de ctedra de Teora Poltica Contempornea en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA e investigador principal del CONICET.

Acadmico, consultor a veces, editor ocasional, escribiente constante: Novaro arm una trayectoria que alterna proyectos de largo aliento con mirada clnica sobre la coyuntura. Public, entre otros ttulos,Poltica y poder en el gobierno de Menem en coautora con Vicente Palermo en 1996;As lo viv. Hctor Magnetto en dilogo con Marcos Novaro, porPlaneta en 2016;Historia de la Argentina 1955-2020, publicado porSiglo XXI en 2021; y hace pocos das se public por editorialEdhasa:Lo bueno, lo malo y lo feo. Dos aos con Milei —una anatoma sobria del experimento libertario—, de prximapresentacin.

En 2017, Novaro recibi el Premio Konex en la categora «Comunicacin y periodismo». La razn no fue un giro de oficio, sino una sostenida participacin en los medios: columnas, anlisis, comentarios. Su pensamiento no slo se qued en la tiza y el pizarrn. Lleg TN, Canal 13 y las pginas deClarn yLa Nacin. «La participacin en medios siempre me pareci interesante y atractiva, incluso ms que la academia», seala Novaro. Y agrega: «El debate acadmico muchas veces es faccioso. Cada tribu escribe y se lee entre s; funciona de modo cerrado. Por eso me dio satisfaccin recibir un reconocimiento por mi trabajo periodstico sin ser periodista de profesin. Es algo que me interesa y me gusta hacer. En ciertos aspectos el periodismo me result ms estimulante que el debate acadmico en los ltimos aos».

—Has forjado una independencia intelectual. Qu condiciones la hicieron posible? —preguntaEl Economista.

—Ni siquiera me describira as. Dira que soy, en todo caso, un poco escptico. No cnico, pero s resignado. Son los aos —responde Novaro.

Barrio porteo, escuela pblica heterognea, universidad en apertura democrtica, archivos internacionales, libros de autora, proyectos colectivos, participaciones en medios, trabajos, reconocimientos. En el fondo, el mismo recorrido une biografa y toma de posicin: no temerle a la incomodidad.Novaro va a contramano de la poca, no le encanta hablar de s mismo: prefiere pensar.

Queda, por ltimo, la hiptesis poltica que resume su mirada: una oferta de centro que deje atrs la ambigedad y sea capaz de ordenar egos y programa, y el deseo de un oficialismo que haga menos y mejor. Si esas condiciones se fortalecen, Novaro estima que habr un mejor panorama para 2027. Y eso es lo que prefiere. Porque en el caso contrario, elucubra, la poltica volver a su pndulo conocido. En lo que sigue se ocupa de diseccionar los motivos.

marcos03
Novaro va a contramano de la poca, no le encanta hablar de s mismo: prefiere pensar.

—En el artculo «La revancha de los moderados» escribs que para el gobierno de Milei sera conveniente apoyarse en sectores de centro para poder hacer cambios ms amplios. Considers que Milei est dispuesto a recorrer ese camino?

—En su primer ao Milei hizo algo bastante parecido a lo que ahora se le reclama. Despotric contra el Congreso y los moderados, pero luego negoci con ellos, aprob las leyes que necesitaba y consolid su programa. No es que no sepa hacerlo, o que no est dispuesto cuando lo precisa.

El problema es que ahora tendr que hacerlo en condiciones mucho ms complicadas que en 2024. Entonces contaba con un apoyo amplio, los moderados estaban ms coordinados y el kirchnerismo estaba aislado y deslegitimado. Despus de estas elecciones el panorama ser distinto: l estar ms complicado y sus adversarios ms fuertes, quienes lo seguirn bombardeando.

La cuestin es hasta dnde Milei puede avanzar con una estrategia que, si hubiese mantenido en 2024, quiz le habra evitado parte de las dificultades actuales. Esa oportunidad ya se perdi. Ahora tendr que conformarse con mucho menos.Vuelve a insistir con la reforma laboral, lo cual es absurdo: no hay ninguna posibilidad de que se apruebe. En vez de concentrarse en el presupuesto y consolidar el plan de estabilizacin, pierde energa en iniciativas que hoy no tienen sentido. No por falta de negociacin con los moderados, sino por negociar temas equivocados.

—Macri podra convertirse en garante de una nueva etapa del gobierno?

—No porqueMacri ya no es lo que era. En 2024 todava era el jefe del PRO. Hoy, qu significa eso?El PRO es un hormiguero pateado, un desastre que l mismo gener.Macri perdi la capacidad de coordinar a los moderados.

Antes, a travs de Ritondo, se sentaba con De Loredo y Pichetto y controlaban buena parte de la negociacin legislativa. Ni l, ni De Loredo, ni Pichetto pueden hacerlo hoy: ese espacio se desarm. No es slo culpa de Milei. Macri tambin contribuy a destruirlo, al sembrar desconfianza entre los moderados. Despreci al radicalismo y quiso forzarlos: o se sumaban al gobierno, o desaparecan.

Aunque Milei incorpore a Macri de algn modo, no le alcanzar. Hoy los gobernadores tienen mucho ms peso: son ellos quienes definen cmo votan numerosos legisladores en el Congreso.

Marcos Novaro:
Marcos Novaro: «Macri perdi la capacidad de coordinar a los moderados»

—La sociedad argentina est dispuesta a premiar la moderacin?

—Depende de lo que los moderados ofrezcan. «Moderado» sigue siendo casi una mala palabra. No es que se hayan ganado un gran prestigio.

Hay una posibilidad de revancha de los moderados, pero depende de lo que hagan. Provincias Unidas no es algo que despierte entusiasmo. No hay una ola de gente deseosa de votar a ese espacio. Tal vez ganen en Crdoba, pero dudo que lo hagan en Santa Fe, y en el resto del pas obtendrn resultados escuetos.

—Qu evaluacin hacs del espacio de Provincias Unidas y del intento de varios gobernadores por consolidar una alternativa al kirchnerismo y al milesmo?

—En principio, es una buena idea.Viene a ocupar el lugar que tuvo el PRO, que ya no puede cumplir ese rol. Aunque les queda un largo camino por recorrer.

Tienen que crear mecanismos de cooperacin entre ellos, definir candidaturas para 2027 y hacerlo pronto, si quieren generar expectativas de que habr una nueva oferta poltica. Hay dirigentes valiosos. Llaryora y Pullaro se entienden bien; Pullaro ya dijo que no competir por la presidencia y buscar la reeleccin en su provincia. Eso es sensato.

Ahora bien, en la opinin pblica no tienen gran arrastre.En muchas provincias casi no existen, o lo que ofrecen es dbil.

En la Ciudad de Buenos Aires, directamente, se han peleado todos. Hay una cantidad absurda de listas con radicales. Manes, Lousteau y otros han administrado mal el radicalismo en estos aos.

Hay un problema serio ah, que llevar tiempo resolver. Espero que no les vaya tan mal como para desaparecer, porque de su supervivencia depende tambin que exista una expectativa de alternancia no pendular. De eso depende, en buena medida, la suerte de Milei.

Por ms esfuerzos que haga para estabilizar la economa y generar confianza —y aunque tenga el respaldo de los Estados Unidos—,si no hay una alternativa distinta de Kicillof, los bonos argentinos seguirn sin valer nada. Nadie invertir en un pas donde la oposicin, con el 40% de los votos, dice abiertamente que va a defaultear.

«Si no hay una alternativa distinta de Kicillof, los bonos argentinos seguirn sin valer nada»

—Kicillof es hoy el lder de la oposicin?

—Por ahoraes el principal referente. El que lleva la voz cantante es l.

En las encuestas ha mejorado bastante desde septiembre, y habr que ver si logra consolidar ese impulso y reemplazar a Cristina. Es probable que estas elecciones terminen por confirmar su preeminencia, sobre todo porque en la provincia de Buenos Aires le ir mejor que en el interior, donde las listas responden ms a Cristina.

Kicillof viene con viento a favor, aunque si va a llegar a convertirse en un lder nacional del peronismo todava es incierto. Genera desconfianza. Ningn gobernador lo invita a visitar su distrito, y distintos dirigentes territoriales —gobernadores, intendentes, referentes locales— estaran ms dispuestos a acercarse a Llaryora que a l.

—Cmo imagins la convivencia entre Cristina Kirchner, Sergio Massa y Axel Kicillof en la etapa posterior al 26 de octubre?

—Hay una tensin evidente entre los que tienen votos y los que no. Kicillof, en lo econmico, es un salvaje, pero en trminos polticos es un dirigente capaz de convivir con Milei dos aos ms sin mayores problemas. Incluso puede encontrar cierta comodidad al dejar que Milei siga haciendo el trabajo sucio mientras gana tiempo para armar su coalicin.

Cristina est en otra situacin: pierde votos, vnculos territoriales y necesita una crisis para legitimar su exculpacin, algn tipo de perdn que le permita salir de la crcel. Ah se enfrentan dos intereses distintos sobre cmo pararse frente al gobierno: Kicillof y Cristina.

Massa, como siempre, es un oportunista. Puede oscilar entre las distintas posiciones segn le convenga. Si Kicillof se consolida, l pierde espacio; por eso preferira verlo con dificultades. En las disputas por las fechas de votacin y las listas en la provincia, Massa estuvo ms cerca de La Cmpora que de Kicillof. Despus se muestra equidistante, juega a todo, segn la oportunidad.

La clave, ms que ellos tres, est en los gobernadores. Figuras como Osvaldo Jaldo en Tucumn o Ral Jalil en Catamarca, que tienen votos y territorio. Habr que ver si alguno de ellos compra el paquete de Kicillof, de Cristina o de Massa.

cfk exculpa
Marcos Novaro: «Cristina pierde votos, vnculos territoriales y necesita una crisis para legitimar su exculpacin»

—Sobre todo en la Ciudad de Buenos Aires se observa una fragmentacin de los espacios de centro: Ocaa y Lousteau por un lado, Hernn Reyes por otro, Facundo Manes por su cuenta, entre otros. Por qu cuesta tanto articular una referencia comn en ese sector?

Porque quien cumpla ese rol —el PRO— abdic. El PRO representaba al centro y a la centro-derecha, con ramificaciones hacia el progresismo. Cumpla bien ese papel, tanto en la Ciudad como en el resto del pas. Adems, tena una caja poltica atractiva, que ayudaba a mantener la cohesin: ofreca cargos, oportunidades y lo haca con cierta generosidad.

La fragmentacin actual empieza cuando el PRO se rinde frente a Milei. Primero intenta competir solo —una estrategia que fue un error gravsimo— y despus se entrega. En mayo no le fue tan mal: sacaron alrededor del 15%, un electorado respetable. Podran haber construido una coalicin de centro que, incluso si perda, habra mantenido representacin y tal vez el ingreso de un senador.

Macri se equivoc dos veces: primero al competir solo contra Milei y luego al rendirse.Ese doble error arrastr a todos los dems, incluyendo al radicalismo.

El radicalismo porteo termin devastado por la guerra interna entre Manes, Lousteau, Yacobitti, entre otros.

«Macri se equivoc dos veces: primero al competir solo contra Milei y luego al rendirse»

—Es llamativo que Lousteau y Manes vayan separados.

Son dos personajes con egos enormes. Cuando hay egos tan fuertes, no importa coincidir polticamente. Y eso lo hace inviable. La desproporcin entre lo que realmente representan y lo que imaginan que valen es enorme.

Adems, la crisis del gobierno los confundi. Creyeron que podan dar el batacazo, que reemplazaran al PRO en el electorado moderado.

«Lousteau y Manes son dos personajes con egos enormes», asegura Novaro.

—El peronismo gestiona mejor los egos?

—Por supuesto.Los partidos, en el fondo, sirven para eso: para administrar el ego.Cuando alguien tiene una idea desproporcionada de su propio valor, el partido lo ubica en su lugar. El peronismo, con todas sus divisiones, siempre lo hizo. Puede tener conflictos, descoordinacin o ausencia de reglas, pero funciona: los que se van vuelven.

El peronismo conserva un ncleo de votantes fieles ms grande que el de cualquier otro partido, lo que le permite cierta desprolijidad, pero tambin capacidad de disciplina. La marca, en s misma, disciplina.

En cambio, en la UCR, cuando estalla una guerra de egos, se destruyen entre s y se quedan todos sin nada. Y esos cismas duran dcadas.Massa se fue y volvi con Cristina en cuestin de meses. En cambio, figuras como Lpez Murphy, Stolbizer o la propia Carri se alejaron del radicalismo y jams volvieron. Todos vienen de ah, pero terminaron afuera, sin partido y, en muchos casos, sin estructura.

Manes repite ese error: cree que vale ms que el partido. Para l, el radicalismo es un colectivo circunstancial al que se sube y del que se baja cuando le conviene. Lousteau piensa parecido. Para ambos, las instituciones valen poco.

Manes repite ese error: cree que vale ms que el partido

—Con la oferta poltica tan fragmentada, una minora intensa puede alcanzar para ganar una eleccin. Qu riesgos implica eso en un pas con instituciones y economa ms frgiles que las de Estados Unidos?

—Depende de lo que se haga despus de ganar. se es el caso de Milei: pudo ganar solo, porque en un escenario de fragmentacin basta con llegar al balotaje y dejarse llevar por la espuma. Se forma una mayora artificial, efmera, pero suficiente para ganar.

El problema es creer que con eso se puede gobernar.Milei pens que el trnsito entre la victoria electoral y el poder sera automtico, y que podra convertir esa mayora prestada en una propia.

El sistema puede funcionar, incluso con fragmentacin, si los actores asumen que luego deben construir mayoras en el Congreso, negociar, repartir espacios de gobierno y no pretender hacerlo todo a su antojo.

—EnAs lo viv reconstrus el conflicto entre el kirchnerismo y el Grupo Clarn a partir de tu entrevista con Hctor Magnetto. Hoy el presidente Milei mantiene un enfrentamiento pblico con el mismo grupo —incluso con untuit fijado que lo titula «la gran estafa argentina»—. Observs puntos de contacto entre aquella embestida del kirchnerismo y la actual tensin con el gobierno?

—Es mucho ms modesto. Lo que Milei busca es simplemente asustarlos, ponerlos en aprietos, deslegitimar sus crticas insinuando que detrs hay intereses econmicos.

Pero esa era tambin la premisa del kirchnerismo, solo que iba mucho ms all. El kirchnerismo sostena que los medios eran un actor antidemocrtico, herederos de la dictadura,y que la democracia solo funcionara si se los destrua.En ese sentido, Milei es ms modesto: se limita a ese tuit, bastante tonto pero relativamente eficaz, porque la desconfianza hacia los medios es generalizada y global.

No es un problema argentino. Todos los gobiernos, en mayor o menor medida, repiten lo mismo cuando se enfrentan a los medios.

El kirchnerismo tuvo una pretensin mucho ms ambiciosa: quera intervenir hasta el fondo en el sistema de comunicacin pblica. Tena los recursos y el tiempo para hacerlo. Milei no tiene nada de eso.

Adems, el sistema de medios cambi radicalmente. El peso de Clarn hoy —como grupo, no como diario, que ya pesa poco— no tiene nada que ver con el de hace veinte aos. El panorama es otro por transformaciones mundiales impulsadas por «monstruos» como Elon Musk.

Puede molestar el estilo populista, descalificador y manipulador de Milei, pero no tiene la capacidad ni los instrumentos para hacer lo que hizo el kirchnerismo.Adems,la maquinaria comunicacional del gobierno se desinfl rpido. Dnde estn ahora los streamers, los tuiteros, los influencers tan influyentes? Desaparecieron. Ya no logran mover ni cinco likes. Perdieron eficacia con apenas un par de meses de desorden interno.

gortdo dan
Novaro: «La maquinaria comunicacional del gobierno se desinfl rpido. Dnde estn ahora los streamers, los tuiteros, los influencers tan influyentes? Desaparecieron»

—El gobierno fren el financiamiento universitario y la emergencia peditrica. Puede existir un pas sin universidades ni hospitales?

—Se espera que eso forme parte de la negociacin que el gobierno busca postergar hasta despus de las elecciones. Tiene sentido que lo hagan: estn reservando recursos para negociar. Si aflojan ahora, despus, qu ofrecen? Qu le dan a los gobernadores o a los diputados del centro progresista que quieren llevarse una bandera propia?

No creo que sean tan imprudentes como para dejar de pagar. Saben que deben hacerlo. Pero si pueden demorar, por supuesto que lo harn.

—De cara a los prximos dos aos, cmo imagins la recomposicin del Congreso?

—Si el gobierno logra salir relativamente airoso de las elecciones del 26 de octubre —algo probable, aunque no seguro—, podra presentarse con algunos nmeros maquillados: un poco de crecimiento ac, otro all, y la promesa de que «no nos fue tan mal». Si el kirchnerismo no se fortalece demasiado, la estrategia de bloqueo del oficialismo puede sostenerse. Eso le permitira a Milei conservar un grupo de legisladores dispuesto a negociar y aprobar algunos proyectos.

Pero cules? Con suerte, el presupuesto. No creo que pueda impulsar reformas estructurales. Tal vez logre avanzar en cuestiones impositivas puntuales o en algn tema penal, pero hasta ah. Reforma laboral, no. Si el gobierno gasta tiempo y energa en eso, se va a equivocar. No digo que no lo anuncie —puede hacerlo, si le sirve como bandera—, pero no debera invertir tanto esfuerzo en algo que no va a salir. Sera otra batalla perdida. Mejor concentrarse en lo que efectivamente puede hacer, que ya es poco. Y ahora, incluso menos.

El de Milei siempre ha sido un gobierno chico.La histeria antifascista de quienes crean que Milei iba a arrasar con todo era, en realidad, una mezcla de fantasa y pesadilla. Nunca tuvo chances de que eso ocurriera. Menos an con los errores que cometi, aunque incluso si hubiese hecho todo bien, tampoco estara arrasando electoralmente.

Pensar que Milei, con tan poca experiencia y con todos los delirios que lo impulsan, no iba a cometer errores graves era ingenuo. No lo subestimo: en las condiciones en que asumi, con su inexperiencia y su dogmatismo, lo que logr concretamente no est tan mal.Si en los dos aos que le quedan consigue ajustar algunas cosas, hacer un poco de sintona fina y consolidar el programa de estabilizacin, terminar el mandato as sera, para l, la gloria, un triunfo enorme. Aunque probablemente siga creyendo que va a refundar el pas.

—Hacia 2027 analizs ms una lgica de tercios o una de polarizacin?

—Depende de qu haga el centro poltico. Demanda de algo distinto hay, perolos votantes siguen desconfiando de los moderados por lo que hacen y por lo que no hacen. No tienen una agenda propia, siguen siendo oportunistas. Dicen que estn de acuerdo con el supervit fiscal, pero despus votan todos los gastos que lo destruyen, sin prioridades ni coherencia.

Si el centro poltico sigue siendo tan ambiguo, no se puede pretender que la gente confe en l.

Ese es el problema que debera resolver para tener chances de que vuelva a existir una competencia en tercios. Deseo que ocurra. Sera una buena noticia, la posibilidad de una salida ms constructiva en 2027.

«Si el centro poltico sigue siendo tan ambiguo, no se puede pretender que la gente confe en l»

—Argentina va a contar con el financiamiento de Estados Unidos?

—Por supuesto. Lo nico seguro es que esa plata est. Nadie garantiza que vaya a alcanzar, porque ms que la cantidad de dinero importa lo que haga la poltica argentina, pero el apoyo existe. Habr un respaldo amplio que puede incluir beneficios comerciales, inversiones relevantes y mecanismos de repago de deuda con mucha utilidad. En ese sentido, se parece a un plan Marshall.

Es algo indito en la regin y puede cambiar las condiciones con las que se ha intentado financiar la democracia argentina desde 1983. Alfonsn hubiera necesitado algo as: alguien que dijera «queremos salvar este pas».

Hoy slo quedaeste ltimo prestamista. Si esto fracasa, no hay alternativa, y el riesgo de convertirse en un Estado fallido es real. Si se combina un eventual fracaso del plan de estabilizacin con una oposicin ms dura, el pas puede entrar en un desgobierno prolongado, con desorden econmico, conflictos polticos intensos y un fuerte aislamiento internacional.

El diagnstico norteamericano sobre las perspectivas de Argentina no es errneo: si esto falla, no s si habr otra oportunidad. Motivos para preocuparse sobran, y est bien que Estados Unidos est preocupado.

trump bessent
«Alfonsn hubiera necesitado algo as: alguien que dijera ‘queremos salvar este pas'», concluye Novaro.

Redacción

Fuente: Leer artículo original

Desde Vive multimedio digital de comunicación y webs de ciudades claves de Argentina y el mundo; difundimos y potenciamos autores y otros medios indistintos de comunicación. Asimismo generamos nuestras propias creaciones e investigaciones periodísticas para el servicio de los lectores.

Sugerimos leer la fuente y ampliar con el link de arriba para acceder al origen de la nota.

 

- Advertisement -spot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img

Te Puede Interesar...

Conmoción en Quilmes: un nene de 8 años está internado en gravísimo estado luego de que le cayera encima un arco de handball

Un nene de ocho años está internado en grave estado en un hospital de alta complejidad de Florencio Varela...
- Advertisement -spot_img

Más artículos como éste...

- Advertisement -spot_img