En medio de un emocionante y esperado viaje de Paula Bernini con sus padres, Ana y Hugo, en el que están recorriendo diferentes puntos de Europa, habiendo ya paseado por Madrid, Milán, Venecia y Florencia, entre otros, en las últimas horas compartió que se encuentra enfrentando una difícil situación de inseguridad.

«No me puedo dormir porque no tengo buenas noticias», comenzó diciendo la periodista de TN para segundos más tarde detallar que se trató de un robo a sus datos bancarios: «Vulneraron la seguridad de mi home banking. Sí, me hackearon el home banking, algo que yo no escuché nunca, porque supuestamente todo lo que es la seguridad de los bancos es efectiva».
La conductora del programa de la mañana junto a Mario Massaccesi inclusó reveló que se trata de las cuentas en las que le pagan su sueldo, y en la que junto a su padre guardaron ahorros para este viaje: «Hackers lograron vulnerar la seguridad de ICBC. Es el banco que me paga el sueldo. Y ahí, en mi caja de ahorro, en pesos y en dólares, yo había depositado plata de mi papá también para poder pagar los gastos que hacíamos acá en Europa con las tarjetas».

La situación fue desesperante cuando intentaron controlar los últimos movimientos y no poder ingresar: «Hoy me metí para poder pagar justamente las tarjetas y me di cuenta que no tenía la plata. No puedo creerlo, porque siempre hablamos de que te pueden hackear determinadas plataformas, determinadas redes, pero el home banking, la seguridad de un banco, no lo puedo creer«.
Desde sus historias de Instagram, la periodista contó que antes de este robo, tuvo comunicaciones con el banco: «Yo me di cuenta que algo estaba pasando con mi home banking, porque yo no me podía meter. De un momento a otro, no pude poner más mi clave de seguridad. Llamé al banco y me dijeron que me quede tranquila, que era un error de sistemas, que pruebe al otro día. Al otro día probé y no pude meterme. En ese momento recibí en mi mail una alerta de movimientos extraños. Llamé al banco y me dijeron que me quede tranquila, que era porque estaba haciendo gastos en dólares. Me quedé tranquila».
Incluso quiso hacer un ingreso a sus cuentas con una clave provista por el propio banco, pero le aseguraron que era una operación imposible de hacer: «Volví a llamar al banco para que me dieran una clave provisoria. Me dijeron que no podían, que tenía que hacer un reconocimiento facial, el reconocimiento facial no me lo tomaba. Bueno, hoy después de mucho insistir, cuando les dije que usen la plata de mi home banking para pagar las tarjetas, me dijeron que la plata no la tenía, que me habían hackeado».
Más allá del mal momento, Bernini remarcó su sorpresa ante lo ocurrido y la falta de respuesta del banco de su confianza: «De alguna forma las tarjetas se van a pagar, este viaje se va a pagar, por supuesto, salió mi hermana al rescate. No es ese el tema. El tema es confiar en la plataforma de un banco, confiar en el home banking y, ahora, darte cuenta que es tan vulnerable como cualquier otra plataforma, como cualquier otra aplicación (…) tengan máxima precaución a la hora de poner las claves, máxima precaución a la hora de dar los números de seguridad de las tarjetas».
«Esto no te arruina la vida, pero sí te hace pasar un mal momento, no está bueno. Y les voy a contar lo que verdaderamente me jodió», continuó la periodista para cerrar contando que se siente arrepentida de haberle contado sobre esta situación a sus padres: «Se lo conté a mis viejos, no tendría que habérselos contado, porque se amargaron mucho. Porque mi papá se hace mucha mala sangre, este viaje se paga igual. De alguna manera, el viaje se va a pagar. Estamos en medio de un viaje que la estamos pasando maravillosamente y hay que seguir pasándolo así».