Para Graciela Pal, subirse a un escenario siempre es un acto de amor y nervios. En cada función revive una fuerte mezcla de emociones que, lejos de apagarse con los años, se intensifica.
Llorar antes de actuar, dedicar la obra a sus seres queridos y rezar como parte de su ritual íntimo son gestos que la acompañan cada noche de función. Es por eso que como excusa de su trabajo en La noche de la basura, obra teatral que lleva adelante junto a su gran amigo Rodolfo Ranni, revela cómo es salir a escena a sus 77 años.
Junto a su colega, quien también oficia como director de la obra, la famosa actriz habla con sinceridad sobre esos minutos previos al encuentro con el público. Además, recuerda a su padre, el actor Pablo Palitos y se refiere a la presión que le genera que su hija y nieta estén entre los espectadores.

«En un estreno, aunque pasa en todos los días de función, te provoca un golpe de adrenalina muy fuerte. Es como salir al ruedo para un torero… Te puede provocar lágrimas, risas o cualquier otra emoción. Eso sí: el miedo está siempre«, dice la actriz sobre las sensaciones que vive antes de salir al escenario. Ante esto, su colega Rodolfo Ranni que se encuentra a su lado, interrumpe y bromea: «Cuando salís a escena el toro es el público».
Con total sinceridad, revela lo que le sucede antes de pararse frente a la platea: «Muchas veces lloro antes de las funciones. Voy al teatro muchas horas antes de la función. Me concentro y me emociono antes de cada función porque se la dedico a mis seres queridos… ¡Soy llorona!».
«Yo le dedico las funciones a mi papá que fue un gran actor. Además le pido ayuda. Además soy muy creyente y rezo siempre antes de salir a escena. Me protejo con las oraciones. Pero, principalmente me da mucha emoción pensar en mi papá y en la gente que me quiere», dice emocionada al recordar a su padre, Pablo Palitos.
Hoy quienes le generan una emoción extra mientras actúa son su hija, Manuela Pal, y su nieta Amparo. «Se mezclan los nervios de ellas con los míos. Por eso no quiero que vengan a los estrenos, en general. Las voy corriendo, pero en algún momento vienen», revela entre risas.

«Es mucho lo que uno pone. A veces lo hablamos con el Tano. Nadie se puede imaginar lo que le pasa a un actor antes de salir al escenario. Es diferente a todo y es dificilísimo», expresa con seriedad.
«Hacer esta obra es un placer. De todos modos mi mayor gusto es encontrarme con este amigo del cual he aprendido mucho a través de todos estos años. Hemos pasado momentos muy gratos y divertidos. Sobre todo nos divertimos. Nos une el cariño, el respeto y el humor», relata sobre su entrañable relación con Rodolfo Ranni, su actual compañero de elenco.
Ante esto, él suma entre risas: «Tenemos nuestro humor personal. Pensamos disparates. Ante un suceso, nosotros empezamos a inventar una historia y nos reímos nosotros. Es un cuento aparte. La gente nos mira raro. Cuando vemos que nos miran raro, inventamos una historia de porqué nos miran raro».
En cuanto a qué cosas de esta amistad se pueden ver en escena, Ranni respondió: «Esta química no se traslada a la obra. Lo bueno es que el teatro no tenga nada que ver con uno. Sino, no existe el teatro. En el escenario no soy yo. Si una obra tiene que ver conmigo no la hago porque el teatro no es autobiográfico«.
Qué hay que saber sobre «La noche de la basura»
La Noche de la Basura es un clásico del teatro argentino escrito por Beto Gianola, con adaptación de Aníbal Litvin y Rodolfo Ranni. La obra regresa renovada de la mano de dos grandes figuras: Rodolfo Ranni y Graciela Pal.
La historia transcurre en el modesto dormitorio de una pareja en crisis que, durante la noche del casamiento de su hijo, enfrenta una conversación pendiente llena de reproches, frustraciones y verdades ocultas. Con una dosis de humor negro, la trama invita a reflexionar sobre el amor, la familia y la comunicación en las relaciones de largo plazo.

La dirección general está a cargo de Rodolfo Ranni y la producción es de Giuliano Bacchi. El espectáculo combina drama, ironía y momentos de risa, capturando con realismo las miserias y absurdos de la vida cotidiana.
La Noche de la Basura se presentará en el Teatro Metropolitan los días viernes 25 de abril, 2 y 9 de mayo a las 20.15.
Fotos: Diego García.