«Mi mente solamente pensaba en escapar«, dijo una mujer de Estados Unidos sobre un desesperante momento de vida o muerte. Ella sufrió un repentino ataque de un caimán y terminó siendo salvada por su esposo, de acuerdo con su relato.
El hecho ocurrió a fines de julio de este año en el condado de Martin, ubicado en el sureste del estado de Florida, según el informe oficial de la policía local.
A principios de este mes, la protagonista del caso en cuestión, identificada por medios estadounidenses como Amber Perren, se dispuso a revelar detalles de lo sucedido tiempo atrás.
Esta ciudadana de EE.UU. de 27 años contó a una emisora de televisión local que el 23 de julio salió a dar un paseo en bote junto a su marido, llamado Kelby, y su perro, Poncho.
Aquel día, el matrimonio y su querido can fueron a navegar en el río St. Lucie, un estuario ―es una masa de agua salobre con conexión al mar abierto― que atraviesa los condados de Martin y St. Lucie.
En un momento de la travesía, durante las últimas horas de la tarde, Amber decidió meterse en el río ―de acuerdo con el reporte de la policía, el agua le llegaba a la cintura― para refrescarse.
Cómo fue el ataque: segundos de desesperación
Al cabo de un rato, mientras estaba adentro del agua, vivió una pesadilla. «Yo me encontraba al lado del bote. Me incliné hacia atrás para mojarme el pelo en el agua y, cuando levanté la cabeza, un caimán me atacó«, declaró la joven, optometrista de profesión, a la emisora de televisión WPTV-TV.
En ese instante, el reptil ―según la descripción del matrimonio, medía más de dos metros de largo― se aferró al brazo derecho de Amber y empezó a intentar arrastrarla bajo el agua.
«Vi la cara del caimán, lo miré a los ojos. Mi mente solamente pensaba en escapar, huir. Le daba puñetazos en la cabeza y trataba de desprenderme«, recordó la estadounidense en conversación con el mismo medio.
A raíz de esta situación, Kelby, quien escuchó los gritos desgarradores de su esposa, se tiró al río para poder rescatarla. Enseguida, el hombre agarró a la mujer del cuerpo y la levantó con la intención de sacarla del agua.

«Cuando Kelby levantó a Amber, el caimán seguía aferrado al brazo de ella«, describió la policía en el reporte oficial del incidente.
A continuación, se produjo un violento forcejeo entre el matrimonio y el caimán. «Jalé a mi esposa hacia atrás y el caimán tironeó para su lado. Pronto, jalé de nuevo y Amber consiguió liberarse del animal«, aseguró Kelby.
Qué pasó después del incidente
Después de escapar, Kelby subió a Amber al bote y la llevó hasta un muelle cercano. Allí acudieron servicios de emergencia que le brindaron primeros auxilios en el lugar. Luego, los paramédicos la trasladaron en helicóptero hasta un hospital de la ciudad de Fort Pierce.
El ataque dejó el antebrazo derecho de la joven gravemente comprometido: los dos huesos del antebrazo resultaron fracturados y la arteria radial seccionada, lo que provocó que la mano quedara prácticamente desprendida. «Mi mano quedó colgando«, expresó. Las lesiones requirieron intervención quirúrgica inmediata.
En los días siguientes, la paciente tuvo cinco cirugías y recibió injertos de piel para reconstruir tejidos dañados.
Como consecuencia de las heridas, Amber padeció síndrome compartimental ―de acuerdo con MedlinePlus, es una afección grave que implica aumento de la presión en un compartimento muscular― en su extremidad. Esta complicación requirió tratamiento activo.

En la actualidad, la optometrista puede mover algunos dedos, aunque la mano permanece en gran parte insensible. Ella se sometió a terapia ocupacional con el objetivo de recuperar movilidad y fuerza. También para aprender a usar la mano izquierda en tareas diarias y profesionales.
Por su parte, los médicos advirtieron que podría necesitar más operaciones para optimizar la función y la sensibilidad del miembro afectado, y la rehabilitación ocupa gran parte del proceso.
Con respecto al caimán, la agencia estatal Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (Florida Fish and Wildlife Conservation Commission, FWC, por sus siglas en inglés), encargada de regular la vida silvestre local, anunció según WPTV-TV que el reptil fue localizado.

A pesar del trauma y las secuelas físicas, Amber aseveró que no perderá el gusto por el agua, pero advirtió que evitará el lugar en donde se produjo el ataque.
«Es mi héroe»
Por otro lado, la joven declaró que considera a su esposo como su salvador. «No dejo de decir que es mi héroe«, manifestó.
A su vez, la optometrista tomó la determinación de hacer una reflexión sobre su caso. “Lo que me tocó vivir nos muestra lo rápido que puede cambiar la vida, en cuestión de segundos. Así que hay que salir y divertirse”, opinó.