Este miércoles por la noche, Mirtha Legrand acaparó todas las miradas del teatro Gran Rex al asistir a una función de La Sirenita, la versión musical que es furor en Avenida Corrientes.
Como era de esperarse, la diva no pasó desapercibida. Cada paso que dio fue acompañado por flashes, aplausos y miradas de admiración. Y lo hizo como solo ella sabe: con elegancia, glamour y una sonrisa que sigue brillando con luz propia.

Acompañada por su histórico asistente y amigo, el diseñador y productor de moda Héctor Vidal Rivas, la diva llegó al complejo teatral luciendo espléndida. En todo momento se mostró de excelente humor, saludó a quienes se le acercaron y posó, con la simpatía que la caracteriza, para las cámaras que la esperaban ansiosas.

El look: Mirtha y un traje rosa que marcó tendencia
Para esta ocasión especial, Mirtha eligió un conjunto rosa viejo de dos piezas con bordados florales en tonos malvas y rosados que adornaban con sutileza tanto la solapa como el ruedo de la falda.

El traje, de corte clásico y elegante, se completó con una bufanda de gasa en tono nude y unos zapatos dorados con cordones que sumaron un toque moderno y atrevido al estilismo. Su peinado clásico y los aros brillantes terminaron de redondear un look digno de alfombra roja.
No es novedad que cada aparición pública de Mirtha se convierte en un evento en sí mismo. Pero lo que sorprendió en esta ocasión fue su vitalidad: firme del brazo de Vidal Rivas, la conductora caminó por la alfombra roja del teatro con total soltura, mientras decenas de personas se acercaban a saludarla o simplemente a admirarla.

Una función especial y una diva que nunca pasa de moda
En la función de este miércoles de La Sirenita Mirtha se llevó todos los flashes. Sentada en una de las primeras filas, la conductora disfrutó del espectáculo con atención, aplaudió sonriente y se la notó conmovida en más de un pasaje del show.

Al finalizar la función, se retiró rodeada por su equipo de seguridad y colaboradores, mientras los presentes no dejaban de alabar su presencia y elegancia. Ella, fiel a su estilo, saludó a todos con cariño y les dedicó unas palabras afectuosas.
Mirtha Legrand demostró, una vez más, que está más vigente que nunca. Su salida para ver La Sirenita no solo fue una muestra de apoyo al teatro argentino, sino también una declaración de principios: el glamour, la elegancia y el amor por la vida no tienen edad.
Las fotos de Mirtha Legrand en La Sirenita



Foto: RS Fotos