Morena Rial volvió a la televisión después de mucho tiempo. La mediática accedió a hablar en un móvil con LAM (América TV) y no se guardó nada. «Hoy estoy bien. Estoy tranquila. Hay un par de cosas que tengo que solucionar, pero estoy tranquila«, comenzó diciendo.
El notero le preguntó si ha tenido momentos de quiebre durante el proceso que enfrenta ante la Justicia, y se sinceró: «Creo que no lloro hace 2 años, fácil. Ni me acuerdo por qué. Por mis hijos, seguramente, pero no lloro a diario«.
En relación a cómo vive la exposición, dijo: «Mucho de lo que soy, es mucho también lo que pasé, obviamente que todos hubiéramos querido que algunas cosas cambien. No te voy a mentir en eso”. Y siguió: «No puedo decir que tuve mala suerte, porque dentro de todo yo estoy bien, no me falta nada. Mis hijos tienen salud, yo tengo salud. Quizás me merecía una infancia más normal«.
Más adelante, se refirió a su maternidad y confesó que sufre el estar lejos de su hijo mayor, Amadeo. «Hace un par de años que ya viene pasando eso. Es mi mayor tristeza esa… Pero no me desahogo con nadie, yo puedo sola. Nadie sabe mis tristezas ni lo que me pasa, nada» confesó. Y siguió: «No creo en la terapia, ahora voy porque no me queda de otra».
En relación a la prohibición que tiene de tener a su nene, sostuvo: «Yo creo que en algún momento la justicia me lo va a tener que dar, porque ni a la peor mujer en Argentina le sacaron a su hijo, hay algo detrás de esto, pero ya llegará el momento».
El periodista quiso saber si mantenía diálogo frecuente con Amadeo vía telefónica, y Morena reveló: «Ahora que el padre estuvo de luna de miel hablé con él todos los días, porque la abuela me llamaba. Pero se me hace muy complicada la comunicación con el papá. Cada dos días aparece si o si. Pero no hablo tan seguido con el padre, si cuando está con la abuela», explicó.
El actual vínculo de Morena y Jorge Rial
Sobre su vínculo con Jorge Rial después de todo lo ocurrido expresó: «Pasamos un montón de cosas de chicas, y también de grandes. Pero le diría que se quede tranquilo, que sea feliz él».
En relación al acercamiento que tuvieron tras su detención, detalló: «Estamos bien, todo bien. Yo estuve muy enojada. A veces dicen que es mejor pedir perdón que permiso. Las disculpas se las pedí por privado. No sé si las aceptó al cien por ciento, pero dentro de todo soy la hija, y no me queda de otra».
Aunque aclaró sobre su rol de abuelo: «Con los nietos es totalmente distinta la relación, no tiene nada que ver una cosa con la otra».
