«Para estar acá uno trabaja, entren y juega pensando en la selección. Y es una linda oportunidad, espero poder entrar en ese plantel para Mundial, que sería un sueño», dijo el zaguero de Villarreal.
Foto: Prensa AUF.
Redacción El País
«Estar en la selección siempre es muy importante para un jugador; el sueño que todo niño tiene, y volver, obviamente, es mucho más lindo», dice Santiago Mouriño desde Malasia. El central del Villarreal es uno de los 17 convocados de Marcelo Bielsa para la fecha FIFA de amistosos ante República Dominicana y Uzbekistán.
Pese a que el uruguayo ya ha sido citado por el entrenador, aún no sumó sus primeros minutos con la mayor, lo que puede llegar a darse en los partidos del viernes o lunes (ambos 9:45 horas de Uruguay). Consultado sobre esto, dijo: «Ahora somos un plantel más reducido, creo que se puede dar el debut. Espero ese partido con ansias, pero estoy tranquilo, recuperando. Espero poder debutar y espero que sea de muy linda manera».
«Esto es una oportunidad para poder demostrarle al entrenador lo que uno puede aportar al equipo. Obviamente creo que esa decisión después es de él. Uno trata de hacer lo mejor en el club. Para estar acá uno trabaja, entrena y juega pensando en la selección. Y es una linda oportunidad, espero poder entrar en ese plantel para Mundial, que sería un sueño y algo muy lindo», expresó en esta misma línea.
Sobre las charlas con el cuerpo técnico mientras no está en la Celeste, explicó que después de cada partido, le envían el video de resumen del juego con las «cosas que hace bien y lo que puede mejorar».
«Es lo que más o menos marca el camino de lo que quiere el entrenador, pero obviamente cuando estás en la selección empezás a hablar con un entrenador de cerca y te puede corregir otras cosas que capaz que por vídeo», acotó el central.
En agosto Villarreal anunció el fichaje del futbolista que estaba jugando en Deportivo Alavés en calidad de préstamo procedente del Atlético de Madrid. El Colchonero fue el equipo que en 2023 lo compró en US$ 2.7 millones a Racing, luego lo cedió a Zaragoza y posteriormente lo vendió en US$ 2 millones a Alavés, pero con una cláusula de recompra por US$ 3 millones que el club.
Esto hizo que el zaguero dejara el fútbol de Uruguay a sus 21 años, lo que lo sacó del radar del público uruguayo. «Es cierto que me fui joven y quizás la gente no me conoce tanto, pero soy un central, que ahora estoy jugando lateral. Tengo un buen duelo uno versus uno, soy fuerte en eso», comenzó y también reconoció su «velocidad».
Foto: AFP.
«Ahora en Villarreal se está viendo una faceta que quizás en los otros equipos no se veía tanto, que es un poco la salida de balón. Me voy sintiendo cómodo con eso y obviamente demostrando también día a día lo que puedo aportar», añadió.
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