Dos niñas uruguayas que integraban una congregación de una iglesia evangélica que visitaba Córdoba murieron esta tarde a raíz del incendio que afectó a un dormitorio contiguo al templo en el que realizaban actividades este fin de semana en la capital cordobesa.
La Policía de Córdoba reportó los decesos de las nenas de 1 y de 5 años y precisó que también dos mujeres sufrieron distintas lesiones.

El fuego, cuyo origen es investigado por los bomberos, fue detectado por otra de las nenas que integra la delegación alrededor de las 15:30 en el templo evangélico, ubicado entre las calles Coquena y Viracocha, y tras el llamado de emergencia a la policía se armó de inmediato un operativo de contención y rescate.
Las nenas fallecidas formaban parte de una delegación de la iglesia Nuevo Amanecer con Jesús de la localidad de Barros Blancos, en el departamento uruguayo de Canelones.
Las víctimas habían viajado junto a sus familias para participar de las celebraciones por el 31 aniversario de la creación de esa agrupación evangelista que tiene sedes en Uruguay y Argentina.

La policía indicó también que en medio del combate de las llamas debieron evacuar del predio a unas 40 personas en medio de la emergencia.
Además, indicaron que los cuerpos de las niñas calcinadas fueron derivados la morgue local para que se realicen las autopsias de rigor, mientras el Consulado de Uruguay tomó contacto de inmediato con el Ministerio de Seguridad de la provincia para coordinar los trámites en torno al caso.

De acuerdo a lo informado por fuentes policiales, la delegación uruguaya había llegado el jueves a la zona en un viaje que combinó barco hasta Buenos Aires y ómnibus a Córdoba y estaba compuesta por 43 personas, entre familias, y autoridades pastorales del templo de Canelones.
El incendio se produjo en la zona donde se encuentran los dormitorios que alojan a los visitantes del templo cuando, por razones que se investigan, el fuego tomó los colchones y la ropa de cama y se expandió tan rápidamente que no dio tiempo a lo adultos a rescatar a las dos niñas que se encontraban en un extremo de la cuadra.
SMB