Nancy Dupláa atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida: este sábado 6 de julio, falleció su madre, Elsa Quatrocchi, y la actriz decidió despedirla con un sentido posteo en sus redes sociales. “Gracias para siempre, mamita”, escribió Nancy junto a una foto en blanco y negro en la que se ve a Elsa con cofia y barbijo, en sus años de enfermera. Una imagen cargada de simbolismo y respeto, que generó una fuerte reacción de afecto por parte de sus seguidores y colegas del medio artístico.

Elsa dedicó gran parte de su vida a la enfermería. Trabajaba durante la noche, incluso fines de semana y feriados, atendiendo en hospitales y geriátricos. Ese compromiso con el cuidado de los demás fue uno de los valores que más marcó a Nancy, algo que ella misma ha destacado en varias oportunidades. “Mi mamá fue una mujer que luchó toda su vida, con turnos agotadores, pero siempre presente”, comentó alguna vez la actriz, que siempre se mostró muy unida a su familia.
Pablo Echarri, esposo de Nancy, ya había hecho mención a la delicada salud de Elsa durante su discurso en la entrega de los Premios Martín Fierro de Teatro el pasado 23 de junio. En esa ocasión, le dedicó el premio a su suegra y expresó públicamente su deseo de que se recuperara, mostrando la cercanía y el cariño que siempre existió entre ellos.

Elsa Quatrocchi fue madre de tres hijos: Nancy, Enrique y Federico. Aunque no era figura pública, la vida de su hija la expuso a momentos de reconocimiento y también de emociones compartidas por el público. En más de una entrevista, Dupláa contó cómo su mamá la acompañó en su camino como actriz, y cómo se emocionó al verla sobre un escenario por primera vez.
Durante los últimos meses, Nancy había compartido algunas publicaciones que reflejaban el delicado estado de salud de Elsa, pero sin dar detalles específicos. En abril, publicó un breve video donde se veía a su madre en un centro de rehabilitación, dando pequeños pasos con andador. “Avanzamos un poco cada día”, había escrito entonces, con esperanza.
El mensaje que compartió ahora es mucho más íntimo. La elección de no escribir largas despedidas sino solo ese “Gracias para siempre” refleja la profundidad del vínculo que las unía, y también el respeto por transitar el duelo en silencio.