El sol acompañó este sábado, en el cierre de la Semana Azul, a las miles de personas que se reunieron en los parques del Planetario para celebrar el Festival Autismo Sin Límites, una propuesta libre y gratuita que combinó música, entretenimiento y un poderoso mensaje de concientización sobre el autismo.
El evento tuvo como eje central sensibilizar a la sociedad sobre el espectro autista. En la actualidad, 1 de cada 36 chicos forma parte de este espectro y, según los especialistas, los diagnósticos crecieron un 900% en los últimos cuatro años. Por la cantidad de casos, el autismo ya se considera una pandemia desde el punto de vista médico, señalan ONG’s que vienen trabajando en la temática, como TEActiva.
Frente a esta realidad, Autismo Sin Límites propuso una tarde pensada para todas las familias, celebrando la diversidad y haciendo foco en el potencial de cada persona.
La jornada comenzó con el DJ Tommy Muñoz, que invitó a grandes y chicos a bailar en el césped del Planetario, transformando el espacio en una gran pista de alegría compartida. Luego, fue el turno de Plim Plim, el reconocido personaje infantil, en un show con mensajes positivos acompañado por sus amigos y su maestra.
El momento más conmovedor llegó con el show de “Iván y sus amigos”, una banda liderada por Iván Demirci, un joven de 24 años dentro del espectro autista no verbal, que fueron quienes impulsaron además el festival.
Iván, en voz y percusión, compartió escenario con Juan Tenaglia (voz, batería y coordinador musical), Matías La Groteria (bajo) y Pato Álvarez (guitarra). Juntos interpretaron canciones propias como “El tren Tomás”, “El Ratón Pérez” y “La Fiesta”, además de clásicos infantiles que hicieron cantar a todo el público.
El Planetario, escenario del cierre de la Semana Azul. “Iván y sus amigos” ya han sido reconocidos por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, el Concejo Deliberante de Mercedes y el Senado de la Provincia por su valor cultural y su mensaje transformador. La banda no solo entretiene, sino que inspira: muestra que detrás de cada diagnóstico hay un mundo de posibilidades.
Con actividades para toda la familia y música en vivo el Festival Autismo Sin Límites, que contó del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, cerró la Semana Azul con un mensaje claro: la convivencia es posible cuando se mira al otro desde sus capacidades.
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