La automotriz Nissan desmontará su línea de producción en la planta cordobesa de Santa Isabel, en las afueras de la capital provincial, y trasladará la fabricación de su camioneta Frontier a Morelo, en México.
La decisión de la automotriz japonesa arrastra al modelo Alaskan, de Renault, que salía desde otra de las líneas montadas en Córdoba. La alianza entre Nissan y Renault en Córdoba duró siete años, desde 2018 hasta fin de éste.
No por anunciada, la salida de Nissan del ecosistema metalmecánico de Córdoba deja de ser un cimbronazo.
En 2022 durante el gobierno de Alberto Fernández, Nissa anunció una inversión de USD 730 millones para producir en el país la camioneta Nissan Frontier. En 2023, con una producción de 180 vehículos por día, la planta de Santa Isabel llegó a las 33 mil unidades. Pero ya con Milei en el poder, el 2024 fue un tobogán para la filial nipona: tuvo 100 días de suspensión de personal y la producción cayó a 17.500 unidades.
Argentina frente a México: Sheinbaum recibe las inversiones tecnológicas que esquivan a Milei
Este año se estima que cerrará con 13 mil unidades. Aunque Renault mantiene sus planes de producción para los modelos Logan, Sandero, Stepwey y Kangoo, es un golpe tremendo para el núcleo de empleo duro de Córdoba. En Santa Isabel trabajan 1.415 operarios, de los cuales unos 400 participaban de los proyectos Frontier y Alaskan.
El impacto mayor es en el sector autopartistas: fuentes sindicales aseguran que unas 3.000 personas de los gremios de Smata, UOM y Plástico quedarán sin trabajo.
En junio, cuando se estima estará completa la producción prevista, se caerían 230 contratos. Luego resta por saber qué pasará con los efectivos. El impacto será mayor en el sector autopartistas: fuentes sindicales aseguran que unas 3.000 personas de los gremios de Smata, UOM y Plástico quedarán sin trabajo.
Galperín eligió México para invertir 3400 millones de dólares y crear 10 mil puestos de trabajo
En Smata apuestan a que a mediados de 2026 el proyecto de la camioneta Niágara permita sostener la producción en Renault.
El de Nissan es otro caso que confirma que los empresarios prefieren invertir en el México de Claudia Sheinbaum, aunque sea de izquierda, por más entusiasmo que les genere el discurso libertario de Javier Milei.
Ya pasó con Marcos Galperín, el dueño de Mercado Libre, que invertirá 3400 millones de dólares en México durante 2025 y proyecta crear 10 mil puestos de trabajo. Las tecnológicas Amazon, Netflix y Microsoft también prefieren a México, como anticipó LPO. Incluso Tesla, de Elon Musk, de quien Milei dice ser amigo.