El número de ciudadanos provenientes de la nación caribeña saltó desde 2.900 en 2010 hasta 271.500 en 2022.
Tras lograr desplazar a la colectividad portuguesa, Venezuela se consolidó como la nación con el mayor número de inmigrantes radicados en Brasil.
El dato se desprende de los resultados de relevamiento divulgados el viernes por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE): el número de ciudadanos provenientes del país caribeño saltó desde 2.900 en 2010 hasta 271.500 en 2022, impulsado principalmente por el éxodo en el último lustro devenido de la crisis económica, política, social y humanitaria.
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«La creciente inmigración venezolana a Brasil refleja la situación económica y política del país, especialmente después de 2017. Durante ese período, el país sufrió una hiperinflación descontrolada, con escasez generalizada de alimentos, medicamentos y productos básicos. Esta situación sumió a millones de personas en la pobreza extrema», repasó la profesora del Instituto de Filosofía y Ciencias Humanas de la Unicamp e investigadora de migración interna y externa, Rosana Baeninger, en diálogo con el periódico local O Globo.
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En la misma línea, la académica subrayó que ocho años atrás, Brasil adoptó la Operación Acolhida en Roraima, orientada a redistribuir los inmigrantes venezolanos en diferentes ciudades del país, además de facilitar la adopción de visas de refugiados para este grupo.
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En contraste, se observó una disminución significativa en la proporción de extranjeros procedentes de Europa (del 29,9 % al 12,2 %) y Norteamérica (del 20,4 % al 7,0 %). Los oriundos de Asia también se desplomaron, del 19,1 % al 5,3 %, mientras que África y Oceanía mostraron variaciones discretas: la primera cedió del 2,7 % al 2,5 %. La segunda experimentó un ligero aumento, del 0,7 % al 1,0 %.
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