La discusión acerca de cómo se comunicarán los resultados de la próxima elección se aceleró durante este fin de semana, a días de los comicios legislativos nacionales.
Tal como publicó Clarín, la pelea entre La Libertad Avanza y distintos sectores de la oposición se activó después de que la Dirección Nacional Electoral (DINE) blanqueara durante el simulacro de la elección su intención de informar un resultado nacional en el escrutinio provisorio del domingo 26, más allá de cómo termine cada elección en cada uno de los distritos.
La DINE depende del Poder Ejecutivo y está a cargo de Luz Landívar, una funcionaria que ubicó allí la gestión de Javier Milei. A su cargo tiene la organización de la elección, con la consecuente transmisión de los datos que van llegando al Correo Argentino desde cada una de las escuelas habilitadas.
Desde la oposición advierten que es una medida inédita respecto a otras elecciones y que beneficia al Gobierno por ser el único que compite con sello unificado de La Libertad Avanza en los 23 distritos y en la ciudad de Buenos Aires. Por eso, manifestaron que impugnarán la decisión ante la Justicia electoral.
Qué posición tiene la Cámara sobre el tema
Si bien es un tema que, de presentarse un reclamo, debería ser saldado en primera instancia, posteriormente puede ser la Cámara Nacional Electoral la que tenga que definir al respecto.
En principio, según pudo saber Clarín, la postura que adoptarían sería que no es un tema sobre el que debe expresarse la Justicia electoral, ya que en todos los comicios legislativos, a diferencia de los ejecutivos, el conteo que se hace «es a través de los medios y es meramente informativo» y «no tiene validez legal».
Así, la Justicia evitaría referirse a cómo deben contabilizarse los votos por tratarse de una tarea de la Dirección Electoral. «Para la Justicia electoral sólo existen dos escrutinios: el de mesa y el definitivo, que se inicia 48 horas después», es el argumento que sueltan conocedores de la cuestión electoral.
Los jueces, en este tipo de casos, no quieren quedar involucrados en decisiones que corresponden a la política y que evidencian de ambos lados un intento por utilizar los datos de la manera más productiva posible en términos de resultados.
Tres decisiones clave de la Cámara Electoral
Cabe recordar que la Cámara Electoral, con los jueces Alberto Dalla Vía, Santiago Corcuera y Daniel Bejas, viene de resolver sobre tres planteos distintos relativos a las elecciones.
En el primero, dio lugar al pedido para que Diego Santilli encabece la lista de La Libertad Avanza. Luego, rechazó el pedido del Gobierno para que se reimpriman las boletas y mantuvo la cara del renunciado José Luis Espert en ellas. Finalmente, decidió que sí se reimpriman los 40.000 afiches que se ubicarán en el ingreso a los colegios donde se votará en provincia de Buenos Aires.

El antecedente del 7 de septiembre
De características diferentes, pero también legislativa, la elección en la provincia de Buenos Aires tuvo un conteo global, más allá de los resultados sección por sección, que le permitió a Fuerza Patria mostrar un holgado triunfo de 14 puntos de diferencia.
En el mileísmo se centran en ese aspecto para recordar que en ese momento el gobierno de Axel Kicillof, a cargo de la transmisión de los datos, implementó un mecanismo similar al que quiere llevar adelante la Dirección Electoral nacional, que reporta directamente al Ministerio del Interior de Lisandro Catalán.
La diferencia es que en el comicio de hace 42 días tanto Fuerza Patria (FP) como La Libertad Avanza (LLA) tenían representación en las ocho secciones electorales y competían siempre bajo el mismo sello. En este caso no: el peronismo eligió marcas electorales distintas en 11 provincias. Aunque este fin de semana, la Justicia decidió que Entre Ríos también sumara para FP y la insignia oficial quedó en 14.

Fuerza por fuerza, provincia por provincia
El conflicto en torno a los resultados se produce debido a que excepto La Libertad Avanza, el resto de las fuerzas políticas no van a competir con el mismo sello en todos los distritos. Eso potencia las chances nacionales de los libertarios, un objetivo que tiene el Gobierno considerando la dificultad de la elección bonaerense.
El caso del PJ es el más emblemático, aunque sucedió también en otras elecciones en los últimos años. En cuatro provincias donde gobiernan espacios afines al kirchnerismo, se crearon otras denominaciones para ir a la contienda electoral.
El gobernador de La Pampa Sergio Ziliotto ungió el frente Defendamos La Pampa; en Formosa, Gildo Insfrán sigue apostando desde 2003 al Frente para la Victoria; el riojano Ricardo Quintela emuló a Ziliotto; Federales Defendamos La Rioja; y Osvaldo Jaldo en acuerdo con su antecesor Juan Manzur apuesta por Tucumán Primero.
En Entre Ríos, donde intenta dar una sorpresa, Guillermo Michel apostó por Fuerza Entre Ríos y la Justicia decidió que pueda sumar a Fuerza Patria. La misma alternativa para provincializar la contienda eligieron, Unidos Podemos, en Chubut; el Frente Justicialista de Mendoza; el Frente Fuerza San Juan, el Frente Pueblo, de San Luis; Fuerza Santacruceña, y Fuerza Patria Peronista, de Santiago del Estero.