La Escola Industrial avanza con su transformación como centro de innovación de lo público. Se trata de un proyecto de gran magnitud con la rehabilitación y adecuación de diferentes edificios históricos del antiguo recinto fabril, que ocupa cuatro manzanas del Eixample. El proyecto, denominado Industrial+, se presentó en 2022 y se ejecuta por fases con un presupuesto de unos 120 millones. La Diputación de Barcelona repensó este espacio una vez descartada la ampliación del Hospital Clínic en este lugar. El plan se sustenta en tres líneas básicas de actuación: protección del patrimonio, la innovación de lo público y el verde urbano.
Este año arrancarán los trabajos de uno de los ejes principales, el de la innovación. Es una de las obras más relevantes no solo por su envergadura sino también por su contenido, ya que se creará un centro internacional de innovación de los servicios públicos con una capacidad para 800 investigadores encargados de elaborar políticas más eficientes. “La Escola Industrial quiere volver a ser aquel motor de transformación que ha ayudado a sacar adelante a Catalunya. Con este proyecto, pretendemos ayudar a los ayuntamientos en las revoluciones que se les vienen encima: la revolución digital con la inteligencia artificial, la climática y la identitaria”, destaca Eloi Juvillà, director de Servicios de Edificación y Logística de la Diputación de Barcelona.
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El inmueble que la ciudadanía podrá cruzar a través de un bulevar
Àlex Garcia / Propias
El centro se ubicará en el inmueble de la antigua escuela de ingenieros, de unos 16.000 m2 de superficie construida. Se prevé que las obras empiecen en octubre con un presupuesto de 55,5 millones y duren unos cuatro años. Una de las actuaciones más vistosas consistirá en crear una acceso abierto a la ciudadanía a modo de bulevar cruzando el edificio desde la calle Comte d’Urgell hasta la antigua residencia de estudiantes, a la altura de la calle Comte Borrell.
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Escaleras que conducen a la antigua sala de los telares
Àlex Garcia
“Será la parte más pública en la que se producirá un intercambio entre la ciudadanía y los investigadores. En un lado, habrá una cafetería de unos 500 m2 y en el otro una sala de exposiciones de más de 500 m2. También se creará un auditorio, unos jardines interiores con una cubierta fotovoltaica. Y se instalará un gran parking para entre 300 y 400 bicicletas con vestuarios debajo del actual edificio de la escuela de adultos”, detalla Juvillà.
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La antigua sala de los telares de la fábrica albergará una incubadora y aceleradora de startups
Àlex Garcia
Por otro lado, el sótano del inmueble se habilitará como una incubadora y aceleradora de startups. Aquí estaba la antigua sala de los telares de la fábrica y esconde una de las joyas arquitectónicas del recinto: las bóvedas sostenidas por columnas de hierro proyectadas por el arquitecto Rafael Guastavino. De hecho, otra de las patas de la futura Escola Industrial corresponde a la puesta en valor de su patrimonio por lo que a través de una apertura se dejará a la vista una de las cúpulas de Guastavino en la planta superior.
Se dio la afortunada circunstancia de que el arquitecto Joan Rubió i Bellver cuando intervino en la construcción de la Escola Industrial entre 1923 y 1930 hizo el nuevo edificio encima conservando la parte de la fábrica y, en consecuencia, la bóvedas tabicadas de Guastavino, quien luego las exportaría a numerosos espacios en EE.UU., como en la neoyorquina estación Grand Central.
![La antigua sala de los telares de la fábrica albergará una incubadora y aceleradora de startups](https://www.lavanguardia.com/files/content_image_mobile_filter/uploads/2025/02/05/67a3262386235.jpeg)
Otra imagen de la antigua sala de los telares
Ana Jiménez/Archivo
Este eje de la innovación se complementará con dos equipamientos más: un palacio de congresos y una residencia para investigadores. El centro de congresos estará formado por el Paraninfo, rehabilitado en 2020, y dos de sus edificios anexos. Así, el inmueble conocido como 12A, el de la antigua biblioteca de la escuela técnica superior de ingenieros industriales de Barcelona, acogerá una sala de conferencias con un aforo de 134 personas y una planta polivalente en la que se podría habilitar dos salas para 70 personas cada una.
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El inmueble que acogió la antigua biblioteca de la escuela técnica superior de ingenieros industriales de Barcelona formará parte del palacio de congresos
Àlex Garcia / Propias
La actividad es frenética en este inmueble, de unos 4.000 m2 útiles con tres plantas y un altillo. Las obras arrancaron el año pasado y se espera que finalicen en febrero de 2026, con un presupuesto de siete millones. La actuación permitirá conectar el edificio con el Paraninfo mediante un acceso con una escalera y un ascensor.
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Una de las plantas que conformará el palacio de congresos
Àlex Garcia
El otro brazo del palacio de los congresos será el edificio 15, contiguo al Paraninfo y actualmente desocupado. En la pandemia, la planta baja se usó como centro de vacunación. Este inmueble albergará distintas salas con usos polivalentes. Todavía, se puede ver los techos decorados por Rubió i Bellver con corcho como aislante acústico. Aquí, se estima comenzar los trabajos este marzo, con una duración de dos años y una inversión de 6,5 millones. En total, habrá unos 33.000 m2 destinados a la investigación y la innovación.
![Los techos decorados por Rubió i Bellver con corcho como aislante acústico](https://www.lavanguardia.com/files/content_image_mobile_filter/uploads/2025/02/05/67a3265038108.jpeg)
Los techos decorados por Rubió i Bellver con corcho como aislante acústico en el edificio número 15, que completará el palacio de congresos
Àlex Garcia
De forma paralela, a finales de febrero arrancarán dos concursos arquitectónicos. Por un lado, el de la reforma del edificio del reloj, que acogió las naves de hilatura de la fábrica y continuará como dependencias de los servicios territoriales de la Diputación. Y por otro lado, el concurso que dará forma al futuro centro de interpretación de patrimonio del recinto, un nuevo edificio logístico y la intervención para abrir más a la ciudadanía la fachada de la calle Rosselló, además de crear una plaza alrededor de la chimenea.
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Raúl Montilla
![Núria Marín, junto a Jaume Collboni y Ferran Mascarell en la presentación del proyecto este lunes](https://www.lavanguardia.com/files/image_104_108/uploads/2022/03/21/623895c8e81e8.jpeg)
En cuanto al patrimonio, algunos espacios serán visitables, como la chimenea o la capilla con arcos parabólicos del arquitecto Rubió i Bellver, en el edificio del antiguo colegio mayor Ramon Llull de la UB. Otro de los objetivos consiste en que las instalaciones sean auto suficientes desde el punto de vista energético. Para ello, se instalarán placas fotovoltaicas y una gran pérgola que producirá la energía equivalente a 500 hogares.
También se incorporará 16.000 m2 de verde urbano en el ámbito de la calle Comte d’Urgell con las calles París y Rosselló. El inicio de esta actuación está condicionado al ritmo de los trabajos de prolongación de la L8 de Ferrocarrils desde plaza Espanya hasta Gràcia. La previsión es que las obras principales del recinto estén acabadas en 2030.