El calor extremo que marcó la última semana en todo el país finalmente dará paso a un cambio de condiciones con la llegada de un frente frío, que traerá lluvias, tormentas y un descenso de temperatura a partir del sábado, informó el analista meteorológico José María Rodríguez.
Durante los últimos días, la alta sensación térmica y las temperaturas que superaron los 40 grados generaron un fuerte estrés tanto en animales como en cultivos, afectando al sector productivo en general. Sin embargo, este viernes 7 de marzo se mantiene como un día caluroso con humedad elevada y la posibilidad de tormentas aisladas en la tarde debido al acercamiento del sistema frontal. Algunas de estas tormentas podrían ser intensas, con granizo y rachas de viento, por lo que se recomienda seguir de cerca las alertas del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet).
El cambio más notorio llegará en la madrugada del sábado, cuando ingrese el frente frío con lluvias y tormentas mejor organizadas. Este fenómeno se desplazará a lo largo del país, favoreciendo un descenso de temperatura progresivo. En primera instancia, el alivio térmico se sentirá con la propia presencia de precipitaciones, y luego con la rotación del viento al sur, que traerá aire más fresco.
Para el domingo, la inestabilidad podría persistir en la madrugada, pero se espera una mejora en el transcurso del día, con una tarde parcialmente soleada y temperaturas más bajas. En el sur y este, las máximas rondarán los 22 grados, mientras que en el centro y norte se ubicarán entre los 24 y 26 grados. Las madrugadas también mostrarán un descenso, con mínimas por debajo de los 20 grados.
El lunes será el día más fresco de la próxima semana, con mínimas de entre 8 y 10 grados en el centro del país y un ambiente más templado en la tarde. El martes y miércoles, otro pulso de aire frío podría traer más nubosidad e incluso alguna llovizna aislada en el sur, reforzando el cambio de masa de aire hacia un clima más otoñal y agradable.