La inseguridad en Barrio Ceferino de Salta volvió a ser protagonista, luego de que delincuentes ingresaran al edificio municipal ubicado en Anselmo Rojo 41. En el lugar, no solo robaron, sino que también golpearon brutalmente a un guardia de seguridad de una empresa privada, generando pánico entre los empleados municipales por el brote de violencia e inseguridad que recrudeció en forma alarmente en los últimos meses..
La inseguridad en Barrio Ceferino de Salta volvió a ser protagonista, luego de que delincuentes ingresaran al edificio municipal ubicado en Anselmo Rojo 41. En el lugar, no solo robaron, sino que también golpearon brutalmente a un guardia de seguridad de una empresa privada, generando pánico entre los empleados municipales por el brote de violencia e inseguridad que recrudeció en forma alarmente en los últimos meses..
«Nos violentan los autos, nos roban los celulares, incluso nos amenazan con armas. Tuvimos que cerrar el portón porque muchas veces hay hasta tiros», relató una empleada municipal, visiblemente angustiada. «Ya no se puede trabajar tranquilo, y tampoco podemos salir sin miedo. Los vecinos están igual, viven con miedo».
El jefe de Gabinete Municipal, Juan Chalabe, llegó de inmediato al edificio para hablar con los empleados afectados. Los trabajadores reclamaron medidas urgentes ante la inseguridad que se ha vuelto insoportable. «Debemos garantizar la seguridad de nuestros compañeros municipales y de los vecinos de la zona. La inseguridad es una realidad que nos afecta a todos», declaró Chalabe.
El funcionario anunció que el municipio trabajará en coordinación con la Policía y el Ministerio de Seguridad para reforzar la vigilancia en el barrio. «Vamos a tomar medidas concretas, no solo aquí, sino en toda la zona afectada. No podemos permitir que los empleados trabajen con miedo, y que los vecinos vivan inseguros», aseguró.
Con total impunidad
Según relataron testigos, los atacantes actuaron con total impunidad. Rompieron una puerta para ingresar, amenazaron y golpearon a quien se encontraban en el lugar: un guardia de seguridad privada, dejándolo con algunas lesiones. La situación generó un profundo malestar entre los empleados, quienes interrumpieron sus tareas y realizaron una protesta espontánea exigiendo mayor seguridad.
Los trabajadores municipales señalaron que no es la primera vez que enfrentan hechos de violencia. «Vienen desde hace mucho tiempo robando, golpeando y hasta disparando cerca del edificio. Nosotros venimos a trabajar, no a arriesgar nuestras vidas», expresó otro empleado a este matutino.
La protesta tomó mayor relevancia cuando el jefe de Gabinete Municipal, Juan Chalabe, se hizo presente en el lugar para calmar los ánimos de los empleados. Chalabe dialogó con los trabajadores y se comprometió a gestionar un refuerzo en la seguridad, coordinando acciones con la Policía y el Ministerio de Seguridad. «Tenemos que garantizar la seguridad de nuestros compañeros municipales. Vamos a trabajar para que haya presencia policial constante en la zona», aseguró.
Los vecinos de Barrio Ceferino también expresaron su preocupación por la constante inseguridad. «Aquí los robos son a cualquier hora, los autos son violentados, les roban las pertenencias y nadie se siente seguro», dijo una vecina que prefirió no dar su nombre por miedo a represalias.
La situación en el barrio se ha vuelto crítica, y los vecinos y empleados municipales exigen medidas concretas para garantizar su seguridad. Por el momento, la presencia policial será reforzada en la zona, pero el temor persiste entre quienes deben transitar o trabajar en el lugar.