El presidente de Paraguay, Santiago Peña, firmó el decreto que oficializa la designación de los grupos criminales brasileños “Comando Vermelho” y “Primeiro Comando da Capital” (PCC) como organizaciones terroristas internacionales. La medida fue informada este sábado por el Gobierno paraguayo.
Esta decisión se produce en un contexto de crisis de seguridad en Brasil, luego del mayor operativo policial ocurrido esta semana en Río de Janeiro, que dejó un saldo de más de 130 muertos y que involucró de forma directa a estos grupos criminales enfrentados a las fuerzas del Estado brasileño.
Ante el riesgo de desborde, el Comando Tripartito de la Triple Frontera advirtió sobre un posible ingreso de miembros de facciones criminales a territorios de países limítrofes. En respuesta, el mandatario paraguayo ordenó elevar al máximo el nivel de alerta en toda la franja fronteriza con Brasil.
El decreto presidencial se fundamenta en que “existen elementos suficientemente acreditados para sostener que ambas organizaciones delictivas transnacionales se encuentran operativamente presentes en el país“.
“Para nosotros no hay ninguna duda, estos grupos criminales son grupos que buscan la inestabilidad de los países y nosotros tenemos que enfrentarlos”, manifestó al respecto Santiago Peña.
Golpe millonario
En el marco de la lucha contra estas organizaciones, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay informó que culminó de forma exitosa el operativo binacional “Nueva Alianza 53”, realizado en cooperación con la Policía Federal del Brasil.
La operación, que incluyó diez días de incursiones aéreas y terrestres en zonas boscosas de los departamentos de Canindeyú, Caaguazú y Alto Paraná, resultó en la destrucción de casi 1.000 toneladas de marihuana.
Los equipos tácticos erradicaron 309 hectáreas de cultivos ilícitos.Se desmantelaron 96 campamentos logísticos utilizados para la producción y acopio. Dentro de estos campamentos, se hallaron y destruyeron más de 39 toneladas de marihuana picada y prensada.
Según las estimaciones técnicas de la Senad, las tareas realizadas impidieron la circulación regional de al menos 966 mil kilos de cannabis. Este volumen habría generado ganancias superiores a los 144 millones de dólares estadounidenses en el mercado brasileño.
El ministro de la Senad, Jalil Rachid, y el embajador de Brasil en Paraguay, José Antonio Marcondes, destacaron el impacto de la operación en las finanzas del narcotráfico y reafirmaron la “responsabilidad compartida” entre ambos países para fortalecer las acciones conjuntas permanentes contra el crimen organizado.
Fuente: Agencia de Noticias NA







