Paraguay está buscando mayores fuentes de energía e impulsar la inversión privada para financiarla. Es así como, luego de distintas legislaciones, el país ha anunciado la construcción de 22 pequeñas centrales hidroeléctricas (PCH) con una inversión de 1,400 millones de dólares.
Este proyecto, impulsado por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), estima generar alrededor de 25,000 puestos de trabajo tanto directa como indirectamente. Se utilizarán los ríos internos del país para la construcción de las represas y se licitarán al sector privado para que concesionen la obra en su comienzo.
Gracias a esta iniciativa, la nación diversificará sus fuentes de energía. De acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la matriz energética de Paraguay es 76% proveniente de energías renovables y de ese porcentaje, un 40% corresponde a hidroeléctricas.
En entrevista con DFSUD, la consultora de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade), Angela Livino, comentó que a diferencia de las hidroeléctricas tradicionales, las PCH requieren de menos espacio y no implican grandes desplazamientos de comunidades ni inundaciones extensas, lo que disminuye los conflictos ambientales y sociales.
“Las PCH permiten generar energía cerca de los centros de consumo, reduciendo las pérdidas en la transmisión y mejorando la calidad del servicio eléctrico en regiones alejadas”. La licitación es un tema que se tiene que reglamentar, pero la idea es que estos proyectos sean atractivos para los inversionistas extranjeros.