
Foto: Ignacio Sanchez/Archivo El País.
Entre el 1° de enero y el 31 de diciembre de 2024 el Frente Amplio (FA) declaró haber ingresado a sus arcas el equivalente a US$ 11.716.000. Poco más de US$ 10 millones correspondieron a los aportes que el propio Estado efectúa a los lemas para su financiamiento, en las diversas modalidades previstas en la ley de Partidos Políticos vigente desde 2009. El actual oficialismo declaró, además, US$ 1,2 millones de aportes de adherentes y cargos políticos, y otros US$ 247 mil correspondientes a «contribuciones extraordinarias».
Así lo indica el informe de Rendición de Cuentas que el FA, al igual que la mayoría de los otros lemas que compitieron en las elecciones de 2024, presentaron ante la Corte Electoral.
Según el detalle, el oficialismo aseguró haber tenido egresos por US$ 10,9 millones el año pasado. De esa cifra, poco más de US$ 1 millón se fue en gastos de funcionamiento y mantenimiento de la sede central, US$ 429 mil en las diversas comisiones internas y US$ 590 mil en aportes a coordinadoras y departamentales.
Como partido, en la campaña electoral de 2024 el FA dijo haber invertido US$ 8,9 millones. La mayor parte de esa cifra fue para los comicios de octubre y noviembre. En actos políticos, la coalición de izquierda invirtió US$ 48 mil. De esta forma, el resultado financiero presentado ante la Corte Electoral fue positivo en US$ 814 mil.
Blancos y la reforma de la sede
El Partido Nacional tuvo ingresos declarados el año pasado por una cifra mucho menor: US$ 1,3 millones. La mitad de esa cifra, US$ 671 mil, llegó —según declaran— de los aportes de cargos políticos previstos en la carta orgánica partidaria. Otros US$ 385 mil fueron por financiamiento público previsto por la ley, y otros US$ 221 mil por aportes de adherentes.
Es preciso tener en cuenta que las rendiciones presentadas ante la Corte Electoral corresponden a los lemas, y son diferentes a la que deben realizar candidatos, sectores y agrupaciones.
Del otro lado, los nacionalistas informaron egresos por US$ 1,37 millones, ligeramente superiores a sus ingresos. Unos US$ 353 mil fueron para sueldos y cargas sociales, US$ 278 mil en obras de reforma de la sede partidaria, y US$ 120 mil se gastaron en comunicación. En lo que respecta a la campaña, los blancos invirtieron US$ 132 mil, entre más de veinte ítems.
Pero como el partido contaba con un saldo inicial de US$ 464 mil, el resultado final al 31 de diciembre fue positivo en US$ 436 mil.
En lo que respecta al Partido Colorado, la documentación presentada señala ingresos por US$ 378 mil. De esa cifra, US$ 152 mil correspondieron a aportes públicos y el resto a aportes de cargos ejecutivos y legislativos. Los colorados no declaron ingresos extraordinarios ni donaciones durante el período.
En cuanto a egresos, dijeron haber tenido US$ 364 mil, divididos en mitades entre «gastos de funcionamiento» y «otros gastos». El partido no individualizó egresos específicos por la pasada campaña electoral.
Por lo tanto, el informe presentado por los colorados registró un pequeño saldo positivo, de US$ 13.800.
Cabildo con pérdidas
Cabildo Abierto declaró haber tenido ingresos por el equivalente a US$ 1.091.000 el año pasado. La mitad de esa cifra correspondió a aportes por votos de la Corte Electoral. También ingresaron a sus arcas US$ 212 mil por aportes de sus cargos políticos y electivos, y US$ 200 mil por cesión de partidas de legisladores. Otros US$ 95 mil salieron de aportes de sus dirigentes en forma privada, siempre según lo declarado.
Cabildo Abierto fue el único partido que dijo haber tenido más egresos que ingresos el año pasado. La formación gastó en 2024 US$ 1,7 millones. Los dirigidos por Guido Manini Ríos aseguraron haber invertido US$ 577 mil en gastos de funcionamiento, sueldos y honorarios. De esa cifra, US$ 169 mil se fue en sueldos de secretarios de sus parlamentarios.
Pero el grueso de los gastos declarados por los cabildantes responden directamente a la campaña electoral. En la elección nacionales dijeron haber invertido US$ 792 mil. Otros US$ 221 mil fueron para su campaña por el frustrado plebiscito por una «deuda justa». A su vez, US$ 100 mil fueron para la elección primaria.
Por lo tanto, las cuentas de los liderados por Manini Ríos cerraron en 2024 en rojo con un déficit de US$ 625 mil.
En tanto, entre el 1° de enero y el 31 de diciembre de 2024, según su declaración, el Partido Independiente tuvo ingresos por US$ 477 mil. De esa cifra, US$ 255 mil tuvieron su origen en aportes de afiliados y colaboradores. Otros US$ 91 mil llegaron por aportes de legisladores y cargos electivos, y una cifra similar por «excedentes de la campaña nacional».
El partido dijo haber tenido egresos por US$ 326 mil. De ese subtotal, US$ 207 mil fueron para financiar la campaña electoral. Así, la diferencia entre ingresos y egresos fue de US$ 151 mil. Como el balance registra un saldo de US$ 240 mil al inicio del año, el Partido Independiente declaró un resultado positivo de US$ 361 mil.
Los números de Vega
El informe del Partido Ecologista Radical Intransigente (PERI) indicó un saldo inicial al 1° de enero de 2024 de US$ 285 mil. Declaró haber tenido ingresos a lo largo del año por US$ 196 mil, en su mayor parte por los aportes públicos previstos por la ley. A su vez, dijo haber tenido egresos por US$ 261 mi. De esa cifra, unos US$ 115 mil fueron declarados como parte de la campaña de César Vega por renovar su banca. Tomando en cuenta el dinero inicial, el PERI —pese a no haber logrado su objetivo— finalizó el año con un saldo financiero positivo de US$ 187 mil.
La Corte Electoral no difundió los números de Identidad Soberana. Los liderados por Gustavo Salle debutaron en este ciclo electoral y lograron dos bancas en la Cámara de Diputados.