El reciente sismo ocurrido en el norte de Chile reavivó una pregunta que suele surgir cada vez que la tierra tiembla del otro lado de la Cordillera: ¿es posible que un tsunami afecte las costas de la Patagonia argentina?
Aunque a simple vista parezca improbable, la amenaza existe, y está documentada. Si bien los tsunamis son fenómenos más frecuentes en el océano Pacífico —por la intensa actividad sísmica del llamado «Cinturón de Fuego»—, la historia y la geología indican que el Atlántico Sur no está exento de estos eventos.
La costa atlántica argentina, incluida la región patagónica, no se encuentra en una zona de subducción activa como la del Pacífico. Sin embargo, ciertas condiciones muy específicas podrían generar un tsunami capaz de llegar a nuestras costas. Una de ellas sería un gran terremoto frente a las costas chilenas, en el Pacífico sur, que generara una onda sísmica lo suficientemente poderosa como para atravesar el paso de Drake o propagarse por el estrecho de Magallanes y llegar debilitada, pero perceptible, al Atlántico.
Otra posibilidad —aún más excepcional— sería el colapso de una gran masa de tierra o hielo en el océano, como un deslizamiento submarino o un desprendimiento en masa en una zona costera. Estos fenómenos, si bien muy poco frecuentes, también pueden provocar olas de gran tamaño, aunque localizadas.
No existen registros modernos de tsunamis destructivos que hayan afectado directamente a la Patagonia argentina. Sin embargo, investigaciones geológicas han detectado depósitos marinos inusuales en ciertas zonas del litoral patagónico que podrían estar asociados a eventos de este tipo ocurridos hace siglos o milenios. Estos hallazgos, aunque aún en estudio, refuerzan la idea de que la región no es completamente inmune.
Actualmente, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA) y otras agencias internacionales monitorean de forma permanente la actividad sísmica en el Pacífico, incluyendo la generación de tsunamis. En Argentina, el Servicio de Hidrografía Naval colabora con estos sistemas de alerta temprana, especialmente en la costa atlántica.
En caso de una alerta de tsunami que pudiera impactar la región, se activarían protocolos de evacuación y comunicación con las autoridades locales, aunque por ahora el escenario se considera muy poco probable.
La posibilidad de que un tsunami golpee la Patagonia argentina es baja, pero no puede descartarse por completo. Si bien las características geográficas y tectónicas del Atlántico sur reducen considerablemente el riesgo, la ciencia no lo elimina del todo. Por eso, comprender estos fenómenos y mantener los sistemas de monitoreo y preparación activos es clave para prevenir y actuar ante cualquier eventualidad, por más lejana que parezca.