Asunción, 23 feb (EFE).- El presunto líder y un integrante del grupo criminal paraguayo denominado Clan Díaz fueron abatidos este domingo en medio de un cruce de disparos durante un allanamiento a una vivienda en el departamento de Caazapá (centro), informó la Policía Nacional y el Ministerio Público de Paraguay.
Una comitiva policial y de agentes fiscales de la Unidad Especializada en la Lucha contra el Narcotráfico y el Crimen Organizado coordinaron el operativo denominado ‘Sprout’ en la localidad de Primero de Marzo, en la zona de Tavaí, como parte de las investigaciones de una causa abierta por violación de la Ley de Armas y asociación criminal, señaló la Fiscalía en un comunicado.
El personal interviniente allanó una vivienda donde «fueron recibidos con disparos de arma de fuego provenientes de la parte frontal de la vivienda, por lo que se vieron obligados a hacer uso de la fuerza pública», indicó la Policía en la red social X.
Durante el procedimiento «fue abatido el supuesto líder de la banda criminal del Clan Díaz» llamado Nelson Villasanti, de 34 años, quien tenía órdenes de captura por robo agravado con resultado de lesión grave, robo agravado y homicidio doloso, según la Policía.
Además, falleció un hombre de 18 años identificado como Santiago Benítez Flor, presunto miembro de la misma organización, sobre quien pesaba una orden de captura por asociación criminal.
Otras dos personas resultaron heridas, quienes fueron atendidas en el hospital de San Juan Nepomuceno de Caazapá y se encuentran fuera de gravedad.
El Clan Díaz es una banda que opera especialmente en el departamento de Canindeyú (nordeste) y que las autoridades paraguayas relacionan con el tráfico de drogas, el sicariato y la extorsión, según recoge el diario local Última Hora.
Entre las evidencias incautadas constan un arma de fuego tipo fusil, una escopeta, teléfonos celulares, motocicletas y radios de comunicación, detalló la Fiscalía.
En el operativo también intervinieron la agente fiscal especializada en Derechos Humanos Sonia Sanguinez y el director de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, Hugo Samaniego. EFE
