El 13 de marzo, el presidente de la Administración de Parques Nacionales (APN), Sergio Larsen, anunció la modificación y eliminación de doce normativas vigentes de la administración de parques vinculadas a la desregulación del turismo dentro de las áreas protegidas. En este marco, se propone quitar a la figura del guía de turismo.
En caso de hacerse efectivo, quedará eliminada la obligatoriedad por parte de los concesionarios de contratar a los guías de turismo. Rápidamente, el anuncio generó repudio en el sector ante la posible pérdida de puestos de trabajo y el impacto en la protección ambiental.
En comunicación con Radio Universidad, el secretario de la Asociación de Guías de Turismo de Santa Cruz, Juan Cruz Atencio, aseguró que las declaraciones de Larsen provocaron una “cadena de desinformación”. “La gente se empezó a preguntar si era necesaria la contratación de un guía de turismo para visitar un parque nacional cuando, en realidad, los únicos obligados a contratarlos son las agencias de viaje ya que cualquier persona puede visitar un parque nacional de la manera que se le ocurra”, explicó.
En este contexto, Atencio consideró que las desregulaciones anunciadas van en desmedro de la calidad turística que El Calafate ha ofrecido a sus visitantes. “El Calafate es un pueblo que vive netamente del turismo, ha sido así desde hace más de 40 años. Por eso, hoy, la vara en cuanto a estándares internacionales de calidad está muy alta”, aseguró.
La carrera de Guía de Turismo tiene una extensión de tres años de estudio y requiere de una actualización permanente. Además de saber una variedad de idiomas, esta figura también necesita ser un experto en primeros auxilios. Según Atencio, son el nexo entre la gente y los parques nacionales.
“No solo tenemos que brindar información sobre los lugares, sino que también somos los primeros en responder y activar el plan de emergencia en caso de que ocurra una. Además, somos los encargados de transmitir al visitante todos los valores de la institución y los cuidados del medio ambiente”, consideró.
Si bien la desregularización de la actividad del guía de turismo aun no fue efectivizada, asociaciones de todo el país convocan a diferentes marchas para reivindicar este trabajo. “No representamos ningún costo por parte del Estado. Nosotros pagamos nuestras propias habilitaciones y nos contratan agencias privadas. El hecho de sacar a los guías de las áreas naturales protegidas representa un deterioro a la seguridad en todos los parques nacionales”, destacó.
