En la conmovedora misa para rezar por el descanso eterno del Sumo Pontífice argentino, que tuvo lugar en la catedral de la cabecera distrital, el obispo de San Justo, Eduardo García, realizó una propuesta más que importante: cambiar el nombre de la avenida Crovara y de los barrios Puerta de Hierro y San Petersburgo por el de “Papa Francisco”.
La iniciativa despertó aplausos espontáneos, algarabía y júbilo entre los fieles que participaron de la ceremonia en la puerta de la catedral y en plena peatonal Arieta. “Vamos a tener que levantar firmas”, instó monseñor García. “Hay nombres que estigmatizan, como ´Puerta´ (de Hierro) o ´San Pete´ (San Petersburgo); vamos a levantar firmas para que la avenida Crovara y los barrios de Puerta de Hierro y San Petersburgo se llamen ´Papa Francisco´”, recalcó el prelado.
Visiblemente emocionado, el obispo enfatizó: “Creo que es el deber de gratitud, de poder hacernos cargo. Que el nombre nos vaya transformando y recordando quién puso su mano y su cariño sobre estos barrios”. “Nos tenemos que animar a crecer y vivir esa vida digna que él siempre quiso”, incentivó.
Y, como cierre, reflexionó: “(Francisco) puso el Evangelio en el medio de la Iglesia, por encima de todas las leyes y normas. Le pasó el plumero a mucha telaraña. El pueblo lo llora, el pueblo está triste. Hay muchos caranchos que especulan políticamente qué es lo que viene después, qué es lo que va a pasar: esos son caranchos sin Evangelio. El Papa, en cambio, desde la cama en que estaba internado, donó la plata para la construcción de un colegio secundario para personas con discapacidad, que también llevará su nombre. Ese es un pastor”.