Se acuerda un préstamo de 175 millones de euros para financiar proyectos de regeneración urbana y acción por el clima en la ciudad. En el marco del EIB Forum, dará apoyo a la movilidad sostenible, los espacios verdes, las infraestructuras públicas y la planificación para llegar a la neutralidad climática en la ciudad.
Barcelona es la primera ciudad española y una de las primeras ciudades europeas que recibe apoyo del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
El préstamo permitirá financiar proyectos clave, incluidos en el Plan de inversión municipal (PIM) 2024-2027, como la regeneración de zonas urbanas, la creación de espacios verdes, la adopción de medidas de protección contra inundaciones y la mejora de las infraestructuras de movilidad sostenible y de edificios públicos como escuelas, mercados municipales e instalaciones deportivas, entre otros.
El programa de inversión dará apoyo a la ejecución de las estrategias de desarrollo urbano de la ciudad, incluido el plan Clima, con la voluntad de tener una Barcelona más sostenible, resiliente e inclusiva. Por lo tanto, esta iniciativa apoya la visión integradora de Barcelona en su ambición de resultar una ciudad neutra en carbono en el 2050.
Además, el programa también da prioridad a la integración social y la inclusión, con una atención especial a las necesidades de las mujeres para mejorar su acceso a las infraestructuras y servicios urbanos. Este enfoque está en consonancia con la estrategia y el Plan de acción para la igualdad de género del BEI, y demuestra cómo un diseño urbano integrador puede fomentar las oportunidades económicas.
Barcelona se ha comprometido a llegar a la neutralidad climática en el 2050 en el marco del programa de la misión UE “Ciudad climáticamente neutra e inteligente”. Este préstamo convierte Barcelona en la primera ciudad española y una de las primeras ciudades europeas que recibe apoyo del BEI en el marco de este programa.
Durante el EIB Forum, el alcalde de Barcelona también ha participado en el panel “Invertir en una Europa más sostenible y segura”, en el que se han abordado retos y soluciones relacionados con la vivienda.
El BEI ha tenido un papel destacado en la financiación del desarrollo urbano en toda Europa, con una inversión de más de 150.000 millones de euros en los últimos ocho años para construir mejores ciudades, en ámbitos como el transporte ecológico, la eficiencia energética, la vivienda asequible, la educación o la asistencia sanitaria.
