Aunque la eliminación de aranceles por parte de Estados Unidos representa un alivio inmediato para Guatemala, también reabre el debate sobre la fuerte dependencia comercial del país con su principal socio.
El economista David Casasola advirtió que esta relación, aunque ventajosa por cercanía y demanda, puede convertirse en una vulnerabilidad si Guatemala no avanza hacia una diversificación real.
Casasola explicó que la estructura comercial actual se encuentra fuertemente inclinada hacia el mercado estadounidense y que el país aún carece de una estrategia agresiva para expandirse hacia otras regiones.
La falta de diversificación, tanto en mercados como en productos, expone a Guatemala a riesgos ante cualquier cambio abrupto en las políticas comerciales o económicas de Estados Unidos.
El experto insistió en que esta es una oportunidad clave para repensar la estrategia comercial del país y reducir su dependencia histórica.






