El ejercicio de la caminata juega un papel fundamental para el correcto funcionamiento del cuerpo humano y sus músculos a pesar del paso de los años.
Sin embargo, existen diferentes ritmos a la hora de caminar. Hay personas que están acostumbradas a hacerlo rápido, mientras que otras prefieren caminar despacio.
Según la ciencia, la velocidad al andar puede tener un significado relacionado con el estado de salud de la persona.
El significado de caminar despacio según la ciencia
Si bien caminar lento puede estar asociado a una costumbre o hábito, según Cuidate Plus, el portal especializado en enfermedades y salud, la velocidad a la que camina una persona puede ofrecer indicios sobre diversas enfermedades o incluso la mortalidad.

- En personas mayores, una caminata lenta puede ser un indicio de fragilidad, lo que las predispone a padecer problemas de salud y aumenta el riesgo de sufrir dificultades en la movilidad.
- En jóvenes, la lentitud al caminar puede ser un indicador de una buena o mala recuperación tras sufrir un accidente cerebrovascular.
- Otro estudio realizado en personas de 50 años en adelante reveló una relación entre caminar más despacio y el desarrollo de demencia, lo que sugiere que una caminata lenta podría aumentar el riesgo de padecer esta enfermedad.
- Caminar lento también está relacionado con la probabilidad de sufrir enfermedades vasculares y del corazón.
- Además, existen otras investigaciones que muestran la conexión entre la reducción de la velocidad al caminar y un mayor riesgo de muerte prematura.

Cuáles son las causas de los problemas para caminar según la medicina
El portal MedlinePlus comenta que una variedad de problemas puede causar una alteración al caminar y generar otros problemas.
- Desarrollo anormal de los músculos o huesos de sus piernas o los pies.
- Artritis de cadera, rodillas, tobillos o pies.
- Enfermedades del cerebelo, área del cerebro que controla la coordinación y el equilibrio.
- Problemas de los pies, incluyendo callos y callosidades, llagas y verrugas.
- Infecciones.
- Lesiones como fracturas (huesos rotos), torceduras y distensiones; y tendinitis.
- Trastornos del movimiento como la enfermedad de Parkinson.
- Enfermedades neurológicas, incluyendo esclerosis múltiple y trastornos de los nervios periféricos.
- Problemas de la visión.
Sobre la firma
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