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Tras ser suspendida en el juicio en medio de un escándalo mediático internacional, fue tentada para 2 conocidos conductores.
Julieta Makintach cobró fama en las últimas semanas. La jueza buscaba ser «la mujer que impartía justicia detrás de Dios» pero su nombre y apellido terminó envuelto en un verdadero escándalo, de rebote internacional. Porque con el juicio que investigaba las causales de muerte de Diego Armando Maradona avanzado, se conoció que protagonizaba la grabación de un documental basado en lo que sucedía en el letrado de San Isidro, de forma ilegal.
Julieta, apartada de la causa, decidió refugiarse en la intimidad de su hogar y desapareció de la «escena mediática». Pero ahora se conoció que, a causa de la notoriedad que cobró, habría recibido 2 tentadoras propuestas laborales, que la meterían de lleno en el codiciado mundo del espectáculo y la devolverían, sin escalas, a la exposición.
Por un lado, a Makintach la tentaron para ser parte de la nueva edición del Bailando por un sueño que se está empezando a gestar para el segundo semestre del año, en lo que será el regreso de Marcelo Tinelli a la televisión, con su clásico formato que suele reunir a las «figuras del momento».
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Pero esa no es toda la propuesta que recibió la polémica jueza. Porque ahora también se le sumó que habría sido convocada para ser parte de la nueva edición de Masterchef, el certamen culinario que liderará – a pesar de las idas y las vueltas con Telefe- la mismísima Wanda Nara. Entonces, Makintanch tendrá que elegir, por estas horas, con qué oferta de queda y que la tienta más para lo que, al parecer, será su llamativo desembarco en la tevé.
LA HISTORIA DE MAKINTACH
El fallecido Juan Makintach, padre de Julieta, fue una figura de larga trayectoria en el Poder Judicial de San Isidro, y quienes trabajaron con él lo recuerdan como «un excelente juez, estudioso, reconocido, que siempre decía lo que pensaba con fundamento. Su hija Julieta, casada y madre de dos niñas, asumió el cargo de jueza un 8 de marzo. Al celebrar sus 25 años en la Justicia destacó en LinkedIn que había elegido el Día de la Mujer para asumir el cargo en «homenaje a esa energía femenina, intuitiva, maternal, resolutiva, tan necesaria como complementaria, profesional y humana».
Fue egresada y máster en Derecho Penal por la Universidad Austral, donde impartía clases hasta que fue “suspendida» a raíz del bochorno. La magistrada, que se describía en sus redes sociales como «coach ontólogica», estuvo presente en las 20 audiencias del juicio como vocal del tribunal, siempre maquillada, bien peinada y vestida con cuidados atuendos. Nunca descuidó su aspecto, consciente de que estaba siendo grabada, una evidencia más del ser consciente que estaba siendo protagonista de un documental.
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Makintack antes de la cancelación de su rol como jueza en la causa que investiga las causales de muerte de Diego Maradona.
