Los consultores Analía del Franco, Hugo Haime, Marina Acosta y Raúl Timerman debatieron en el Conversatorio sobre “Nuevas demandas sociales como desafío al Peronismo”, organizado por el Consejo Nacional del Partido Justicialista, que encabeza Cristina Kirchner, y la Escuela Justicialista Néstor Kirchner, que dirige Nicolás Trotta, exministro de Educación del gobierno de Alberto Fernández.
Trotta coordinó el debate, que se realizó con la presencia de unas 30 personas, que ocuparon menos de un tercio del auditorio en la sede porteña de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU). Allí Trotta resaltó la importancia de este tipo de encuentros para esta nueva etapa del PJ, ya que «no alcanza con el fracaso del gobierno, hay que construir un nuevo llamado para la esperanza e incorporar los desafíos del Siglo XXI».
«Esperamos, a partir de sus reflexiones, que los próximos días podamos tener este documento como una herramienta más del Partido Justicialista camino a las elecciones de este año y el desafío que tiene el PJ de construir una alternativa superadora que vuelva a convocar a la gente, para que sea una alternativa electoral esperanzadora, de cara al proceso electoral de este año y también de 2027″, destacó Trotta.
Sin embargo, varios de los oradores plantearon autocríticas, para poder afrontar esos desafíos del peronismo, pese a que no hubo espacio para el debate entre los oradores ni preguntas de los asistentes.
«Estamos en un momento donde la sociedad dice que nosotros no tenemos que ver con la cultura del trabajo, que tenemos que ver con la cultura de los vagos. Tenemos que resolver eso, porque es un desafío», dijo desde el estrado el consultor Hugo Haime, ante la atenta mirada de la secretaria general del Partido Justicialista (PJ), Teresa García.
«Estamos en un gran problema, porque el peronismo perdió el eje para la sociedad. Somos los que generamos planes sociales y llevamos a los pobres a que nos voten. Tenemos que romper esa percepción», insistió Haime.
Y agregó: «El que votó a Massa en el balotaje está preocupado, porque plantea que el peronismo se convirtió al asistencialismo. Por eso, no alcanza con decirle que no a Milei. El peronismo tiene que plantear una propuesta productivista y volver a la cultura del trabajo». De todos modos, aseguró que «Milei tiene una alta probabilidad de fracasar».
Raúl Timerman destacó la necesidad de proponer un proyecto de país federal, que genere empleo y produzca riqueza. Planteó propuestas en siete áreas de desarrollo, que podrían generar en pocos años más de US$ 30.000 millones de incremento en las exportaciones y empleo a 440.000 personas. “Para eso hay que eliminar el RIGI, ganar las elecciones y tener un gobierno que lleve adelante este nuevo proyecto”, sostuvo Timerman.
Pero la consultora Analía del Franco volvió sobre la temática que había planteado Hugo Haime y presentó los resultados de sus investigaciones cualitativas en personas de hasta 40 años, con focus group en todo el país.
«Muchos plantean que el peronismo de antes creaba trabajo, mientras que el de ahora creó vagos», explicó Del Franco. Y añadió que «hay una animosidad muy importante con los planes sociales, ya que la gente dice que el Estado tiene que ayudar a los más vulnerables con trabajo genuino o capacitación, pero no con planes sociales, que tienen que estar focalizados».
En los sectores más humildes de la sociedad, la gente de los barrios populares ve que unos reciben planes y otros no, sostuvo Del Franco. «Hay un conflicto intraclase terrible», donde «el kirchnerismo quedó como la cultura de la demanda, no del esfuerzo». Eso deja al peronismo financiando a «los vagos». No hay tampoco «control» en la decisión de quienes reciben esos planes sociales y quienes no, amplió la consultora. Por eso, recomendó «observar, escuchar, interpretar, ajustar los contenidos, aggiornarse y actuar».
Otro de los tabúes con los que se metió Del Franco fue con el tema de la inseguridad y el garantismo con los delincuentes. «Todos piden mano dura. Acá no hay diferencias de ideologías de izquierda ni de derecha, entre progres y fachos. Todos piden rigor, más exigencia».
«Mi recomendación es aflojar un poco con la cuestión doctrinaria, porque hay mucha resistencia a lo institucional partidario, sino ¿cómo persuadís, como hacés que te escuchen? Si uno sigue con estructuras muy rígidas, no te van a seguir viendo», concluyó Del Franco.
Entre la visión optimista y la autocrítica
Cuando finalizaba la presentación de Analía Del Franco, llegó al auditorio del conversatorio Marina Acosta, directora de Analogías, quien relató que llegaba una hora y media tarde porque venía demorada de la localidad bonaerense de Mercedes, por problemas de tránsito.
«El taxista me preguntó ¿Y cuando lo sacan (a Milei)? Nos viven preguntando cuándo se termina esto. Pero la repuesta es difícil, porque no lo sabemos», comentó Marina Acosta, directora de Analogías, la empresa consultora que era de Analía del Franco, pero varios años atrás se la vendió a dirigentes cercanos a La Cámpora.
Lejos de la autocrítica que plantearon Haime y Del Franco, Acosta destacó sus estudios que hicieron a nivel nacional, donde «más del 55% de la gente dice que el gobierno de Milei es autoritario»; «hoy hay más gente que desaprueba su gestión, en relación a quienes la aprueban»; y «el 55% de la gente cree que Milei participó de la estafa con la criptomoneda Libra y el 80% cuestionó su actitud respecto a esa criptomoneda».
En cuanto a la intención de voto en las elecciones parlamentarias, la directora de Analogías, dijo que su última encuesta le daba a nivel nacional 33% a La Libertad Avanza, 30% al peronismo, 8% al PRO de Mauricio Macri, 4% al radicalismo, 4% a la izquierda, 3,5% en blanco y 19% de indecisos. Mientras que en la provincia de Buenos Aires «el 37% al peronismo, 30,5% a Milei y 33% no saben a quien van a votar».
«El peronismo es visto como el verdadero actor opositor y es competitivo en este escenario si logra canalizar las nuevas demandas», concluyó Acosta.
El cierre del Conversatorio estuvo a cargo de Teresa García, secretaria general del PJ, quien dijo que «la gente está enojada con Milei, pero eso no significa que todavía deposite sus esperanzas en el peronismo».
Y retomó la cuestión de los planes sociales: «Cristina ha hecho algunas intervenciones respecto a la reconversión del Estado. Ella habló de los planes sociales y a los dos días tuvo que soportar una movilización en contra en Plaza de Mayo. Me parece que la intolerancia que tiene el propio partido para repensar y remozarse también es parte de nuestra situación», dijo García, en el cierre del Conversatorio sobre los desafíos del peronismo.