Como el Virgilio que guió a Dante por el infierno y el purgatorio de La Divina Comedia, el curador argentino Mariano Mayer traza un itinerario, imaginario y patriota, entre las más de doscientas galerías de 36 países que por estos días son pura efervescencia en ARCOmadrid, la feria de arte que figura entre las favoritas de los coleccionistas del mundo.
Rodeado de devotos del arte contemporáneo y de algunos funcionarios argentinos -como el secretario de Cultura de la Nación, Leonardo Cifelli, y el encargado de negocios al frente por ahora de la embajada de nuestro país en España, Pablo Virsoro-, Mayer, que lleva más de dos décadas radicado en España, enhebra un recorrido por las ocho galerías argentinas que trajeron sus propuestas para seducir a amantes del arte durante los cinco días que dura ARCO, entre el 5 y el 9 de marzo.
En el stand 7A17 de la galería Del infinito el grupo se detiene a recorrer las piezas inéditas del argentino Osvaldo Lamborghini, ese intelectual inasible que publicó sólo tres libros y que cuando se exilió en Barcelona, asfixiado por el aire de plomo de los 70, decidió no salir de la casa donde murió, a los 45 años, en 1985.
“Convirtió su casa, su cama, en una especie de taller -cuenta Mayer-. Su pareja le traía revistas eróticas y pornográficas. Y hasta el final de su vida se la pasó haciendo estos collages.”
La galería los presenta como “‘Escritura inespecífica’, el solo show de piezas inéditas de Osvaldo Lamborghini”.
Maribel López, directora de ARCOmadridLos collages, que nunca antes se exhibieron en público, incluyen textos, señales, numerología -enumera Mayer-. Va diseñando un mapa que nos permite pensar el erotismo como una ficción y no tanto como una representación, una posibilidad de imaginar otros cuerpos, otras formas y otra manera de relacionar literatura y figuración.”
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La mano del final
El contingente va esquivando visitantes de ARCO hasta el stand 7C28, donde la galería Herlitzka & Co. exhibe “Mano”, una obra en crayón sobre tela, de 24 x 12 cm, en la que el argentino Alberto Greco coloreó el contorno de su mano.
La obra conmueve en particular a quienes conocen cómo murió el artista. Mayer lo recuerda: “Se suicidó. Cuando encontraron su cuerpo, sobre la palma de su mano izquierda había escrito la palabra ‘Fin’”.
Sobre la producción textil del Colectivo que integran Fidela Flores, Candelaria Aaset y Martín Churba, el fundador de la galería, Mauro Herlitzka, comenta: “No es una visión del indigenismo sino una obra contemporánea”. Foto: Clarín.Herlitzka & Co. propone, además, obra de Marcelo Benítez -el artista al que Gumier Maier le negó su muestra en el Rojas-, León Ferrari, Marta Minujín, Fernanda Gomes, David Lamelas y el Colectivo Tsufwelej, entre otros artistas.
Sobre la producción textil del Colectivo que integran Fidela Flores, Candelaria Aaset y Martín Churba, el fundador de la galería, Mauro Herlitzka, comenta: “No es una visión del indigenismo sino una obra contemporánea”.
“Estas obras combinan el trabajo de la comunidad wichi, con tintes naturales y se van conformado entre raíces contemporáneas y raíces precolombinas. Martín Churba suma el toque con producción serigráfica de impresión”, agrega.
Los cuerpos menos pensados
W Gallery es otra parada del recorrido por galerías argentinas. En el stand 7C22, la galería trajo a Madrid obras de Elba Bairon y de Cristina Schiavi que dialogan entre lo abstracto y la figuración.
Marcelo Brodsky en Rolf Art con una de las obras de la serie Territorios. Foto: Clarín.“La producción de Schiavi reivindica las formas del cuerpo no rígidas ni firmes -subraya Mayer-. Con la idea de construir otro tipo de corporalidad que dialoga con la formas que proponen las obras de Bairon.”
Florencia Giordana Braun, fundadora de Rolf Art, otra de las galerías de nuestro país que participa un año más en ARCO, presenta su espacio: “La galería se especialistas en fotografía y nuestros artistas parten de la imagen y se expanden hacia otros soportes”.
Amazonas, el hilo conductor de ARCO 2025
“La propuesta de Rolf Art explora la Amazonía desde una cosmovisión biocéntrica y biopolítica, exhibiendo cómo artistas latinoamericanos, en colaboración con los pueblos originarios, comprenden y representan este territorio, examinando tanto la historia local como las percepciones extranjeras”, explican sobre el proyecto que participa en el programa general de ARCO, que en esta edición se despliega en torno al Amazonas.
Marcelo Brodsky en Rolf Art con una de las obras de la serie Territorios. Foto: Clarín.Rolf, que también trajo obra de Marcelo Brodsky y de María José Arjona, suma al programa de la feria “Amazonias Paralelas”, de los peruanos Roberto Huarcaya y Rember Yahuarcani.
Huarcaya comparte parte del making of de la obra: “Se trataba de un primer fotograma base, de 21 metros de largo, que fue introducido en la selva y luego, repentinamente una luna que no estaba prevista sobreexpuso la pieza -describe-. Hubo que rebobinarla rápido porque tenía muy poco follaje delante. Cambiamos el proceso de revelado. Después de un año la pieza había cobrado otro aspecto porque los químicos generaban una gama tonal. Se llenó de hongos. La naturaleza regresó. Estabilizamos la pieza químicamente y luego Rember la intervino.”
El arte de lo inmediato
“Trajimos a tres artistas contemporáneos que considero ineludibles dentro del arte contemporáneo argentino”, dice Nora Fisch, directora y dueña de la galería argentina que lleva su nombre.
Con precios que van desde los 5 a los 19 mil dólares, el stand 7C09 de ARCO invita a recorrer obras de Claudia Fontes, Fernanda Laguna y Juan Tessi.
Fernanda Laguna con «Poderosa», acrílico sobre tela calada en Nora Fisch. Foto: Clarín.“Son tres artistas que están trabajando con la inmediatez, social, política”, suma el curador guía Mayer.
Mensajes en las ventanas
La Sección Latinoamérica de la feria reservó un lugar para la galería argentina Isla Flotante que en esta edición de ARCO se concentró en la obra de Mariela Scafati, una artista que está haciendo una residencia en España.
La Sección Latinoamérica de la feria reservó un lugar para la galería argentina Isla Flotante que en esta edición de ARCO se concentró en la obra de Mariela Scafati, una artista que está haciendo una residencia en España. Foto: Clarín.“Una antología”, define su autora el conjunto de obras que pueblan el stand.
El espacio, que incluye hasta una pintura de estudio y una pelota de gran valor simbólico se ordena en torno a su pieza “Windows”.
“Surgió de editar conversaciones que tuve con un amigo que estaba viviendo en España y me iba contado el proceso asambleario del 15M (el movimiento de protesta social que surgió en España en 2011) -cuenta Scalfati-. Charlas simples, íntimas. Los cambios de horario. Y anotaciones que para mí se renuevan. No vencen.”
El machismo intervenido
Ruth Benzacar, la galería histórica que suele no faltar a la cita de ARCO, convida este año con obra de los artistas Marie Orensanz, Carlos Herrera, Florencia Rodriguez Giles y Stella Ticera.
Herrera, con una propuesta trasgresora, montó lo suyo en un espacio reservado para sus collages de ilustraciones del Martín Fierro y de páginas de revistas porno intervenidas con órganos sexuales o estampitas de vírgenes y santas.
Carlos Herrera, en Ruth Benzacar, con una propuesta trasgresora, montó lo suyo en un espacio reservado para sus collages de ilustraciones del Martín Fierro y de páginas de revistas porno intervenidas con órganos sexuales o estampitas de vírgenes y santas. Foto: Clarín.“Algunas de estas obras hablan de la crisis económica en Argentina y otras tuvieron que ver con mi salida homosexual al mundo -cuenta Herrera-. Estos trabajos hablan de la religión en la que me formé y, al ser homosexual, sentí que la Iglesia había generado algo en mí que ya no me aceptaba.”
“Van a ver imágenes del gauchesco, del gaucho como el personaje macho argentino intervenidas, imágenes religiosas transgredidas o imágenes que evocan la vida sexual de esas vírgenes o esos cristos”, enumera.
El telar como mapa
Entre las galerías de Estambul, París, Dakar, Bogotá, Teherán o Ciudad del Cabo que integran la sección dedicada a los espacios de arte más jóvenes -bautizado Opening-, Salta se hizo un lugarcito con Remota, la galería de Guido Yannitto que este año propone entonar un dúo entre su propia obra y la del pionero del arte textil argentino Carlos Luis “Pajita” García Bes.
“Yo iba a jugar al taller de Pajita de chico. Ese lugar es un referente en Salta”, admite Yannitto, quien actualmente trabaja en la clasificación y catalogación de la obra de García Bes junto a los nietos del artista.
Remota propone obra en telar de Pajita en conversación con un collage de lana pegada sobre lienzo de Yannitto o un chaguard e una laguna elaborado con tecnología sofisticada.
El itinerario por las galerías argentinas de ARCOmadrid llega a su fin un ratito antes de que los reyes Felipe y Letizia entren a la feria. Vienen a dar la muestra por inaugurada con sus mejores sonrisas. La visita real también incluirá un guiño argentino: los monarcas se tomarán un descanso en uno de los bancos de madera inquieta del artista argentino Pablo Reinoso.
