La Legislatura aprobó en primera vuelta una iniciativa que busca arancelar a los residentes transitorios y precarios el acceso a servicios públicos. El oficialismo defendió la medida como un resguardo de recursos, mientras la oposición denunció discriminación y falta de debate.
La Legislatura de Río Negro aprobó por mayoría, en primera vuelta, un proyecto de ley que establece el cobro de aranceles a extranjeros por el acceso a los servicios de salud y a la educación superior brindados por el Estado provincial.
El legislador Lucas Pica, uno de los autores de la iniciativa, argumentó que se trata de “una manera de custodiar el patrimonio de los rionegrinos” y que la medida busca optimizar recursos ante la reducción de ingresos y la creciente demanda. “Tenemos que priorizar al rionegrino que paga los impuestos y se levanta a forjar nuestra provincia con sus propias manos”, sostuvo.
Según el texto, los residentes permanentes y temporarios mantendrán acceso gratuito a la salud y la educación en igualdad de condiciones con los ciudadanos nacionales, mientras que los residentes transitorios y precarios deberán afrontar aranceles por los servicios. De todos modos, se garantiza que en casos de urgencia o emergencia la atención no podrá ser negada ni restringida.
El debate legislativo dejó fuertes cruces. Desde el bloque Vamos con Todos, Ayelén Spósito rechazó el proyecto por “carecer de estadísticas y de un debate serio en comisión” y aseguró que “ningún rionegrino quedó sin atención o sin un lugar en la universidad por un extranjero”. A su vez, Magdalena Odarda calificó la medida como “un acto criminal de racismo” y José Luis Berros afirmó que “se trata de una política demagógica para encubrir la mala gestión en salud y educación”.
En defensa de la iniciativa, Santiago Ibarrolaza señaló que se busca “cuidar el recurso para consolidar el sistema”, mientras que el presidente del bloque oficialista, Facundo López, rechazó las críticas de discriminación: “El extranjero que tiene toda la documentación es igual a los demás ciudadanos. No vamos a dejar morir a nadie: se los atiende y luego se recupera a través del FOS”.
El proyecto deberá ahora ser tratado en segunda vuelta para convertirse en ley.