
El periodista y dirigente político Santiago Cúneo arribó a la ciudad a bordo de su “Torino Nacionalista” en el marco de las actividades que inició para promocionar su candidatura a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, representando al movimiento Confederal. Durante su visita del viernes de la semana pasada, recorrió la icónica calle Nueva York y se detuvo en el monolito que marca el ‘Kilómetro Cero’ del Peronismo.
Cuneo destacó la importancia simbólica de Berisso para el nacionalismo peronista y manifestó su compromiso con la militancia en un contexto que se presenta desafiante en el ámbito económico, político, social, electoral y religioso. “Es ponernos espalda con espalda para enfrentar un gobierno de ocupación”, determinó al referirse al ‘mandato’ de la hora, consignando que ‘a un gobierno de ocupación se le declara la guerra’.
“No somos oposición, somos enemigos de un gobierno anglosajón. Nosotros somos patria y ellos son colonia imperial, son un gobierno de ocupación para transformarnos en factoría y en ese sentido, estamos haciendo lo que nos dijo Perón: organizarnos, porque solo la organización vence al tiempo”, expresó.
Al liberalismo lo comparó con la ‘piratería’. “El liberalismo no existe. Son piratas, ladrones, usureros, son basura. El liberalismo es todo lo que está mal del ser humano, es el compendio de la Biblia de Satán”, consideró, contraponiendo a ello su definición del peronismo, como una fuerza basada en la justicia social, la igualdad de oportunidades y el ascenso social.
“Nosotros somos todo lo que está bien, somos los 10 mandamientos y las 20 verdades. Ellos son todo lo que está mal: el satanismo, la adoración al dinero, la usura, la explotación, el saqueo, el robo, la tortura y la violación”, enfatizó.
Para el comunicador, la denominada ‘batalla cultural’ no es tal. “Existe una guerra contra un enemigo que tomó el gobierno de los argentinos. No es la primera vez que los echamos de Argentina. Hubo varias invasiones inglesas, yo aspiro a que esta sea la última”, dijo al respecto.
En cuanto a su decisión de postularse como candidato a diputado, manifestó que procura llegar al Congreso ‘empoderado por el pueblo’ y con la misión de enfrentar a quienes considera traidores dentro del propio peronismo. “Voy a ir a patearle el culo y la cabeza a los traidores nuestros”, afirmó sin rodeos, crítico de legisladores que según entiende, traicionaron la confianza de sus votantes al no firmar un pedido de juicio político al Presidente que él mismo presentó en marzo del año pasado.
También expresó su descontento con la ‘pasividad’ ante un escenario de conflictividad social. “Mientras los balazos arrasaban la Avenida de Mayo, los golpes caían sobre los jubilados y un camarógrafo recibía un disparo en la cabeza, nuestros diputados estaban sentados en sus bancas con aire acondicionado, pidiendo café y tuiteando con sus amantes”, planteó, añadiendo que ‘no habrá perdón para los traidores’.
Según evalúa, su llegada a la Cámara de Diputados implicaría un cambio en la dinámica política. “Voy a abrir la puerta del Congreso y voy a meter al pueblo bonaerense dentro. Van a tener que sesionar con las barras llenas de pueblo, poniendo la cara y respondiendo por lo que hacen”, propuso.
En relación a la crisis que sacude al peronismo, responsabilizó al kirchnerismo, con Cristina Fernández a la cabeza, por haber designado a Alberto Fernández como candidato a presidente.
“Perón, en su último discurso en el balcón, tenía toda la mugre a la derecha y toda la mugre a la izquierda y les dijo ‘mi único heredero es el pueblo’. Eso significa que ni los dirigentes, ni los intendentes, ni los gobernadores pueden arrogarse la representación del peronismo. El verdadero peronismo es el pueblo”, sentenció.