Santiago Korovsky no puede evitar sonrojarse ni taparse la cara. Hace horas volvió de Grecia, donde pasó unas inolvidables vacaciones junto a su novia, Celeste Cid. «Me cuesta hablar de mi intimidad», confiesa a Revista GENTE el creador de División Palermo (la serie de Netflix que el jueves estrena su segunda temporada). Y explica que si bien sabe las reglas del juego y que sale con una de las actrices más conocidas del país es la primera vez que le preguntan abiertamente por su relación.
A principio de año, a través de un simpático posteo, rompió el hielo: «El segundo robo del siglo», escribió en Instagram junto una imagen de dos sombras y un arroba muy particular, el de Celeste. Con el humor entre las manos, el actor y guionista se adelantó a lo que muchos podían señalar y blanqueo un romance en el que, para muchos, él estaba «robando». Lo que no se imaginó es que, lejos de correr el foco de esa particularidad, la haría más evidente. «Voy al supermercado y el cajero me pregunta si voy a pagar o si voy a seguir robando», cuenta con un dejo de cansancio.
Santiago Korovsky y Celeste Cid: cómo arrancó la historia de amor
«Nos conocimos en una entrega de premios y después chateando… Nos encontramos un día sin el celular y fuimos a pasear por ahí. Y, bueno, qué sé yo…», dice sobre cómo fueron esos primeros encuentros con Celeste.

Sobre quien dio el primer paso, y sin evitar blasfemiar al darse cuenta de que no podría esquivar preguntas relacionadas con su vida privada, suma: «Hace diez años le había escrito un mensaje en Facebook. Éramos amigos de Facebook, no sé por qué, y le respondí una story… quedó en el vacío. Y después ella me escribió como diez años después».
Santiago, quien acaba de ser protagonista de la producción de fotos con Revista GENTE, vuelve a incomodarse, esta vez por las preguntas. Sigue teniendo esa espontaneidad y dulzura de quien no está tan acostumbrado a los flashes. Al ver el perchero lleno de colores dice que a Celeste le encantaría. También cuenta que ella le da consejos y que entiende que la mirada se centre un poco puesta en la relación. «Ella trabaja de esto desde los 12 años, está acostumbrada», dice.
Las facciones de Korovsky hablan por sí solas. Sus ojos se achinan y aparece una semisonrisa en cada pregunta relacionada a Celeste. «Yo siempre soñé alto en todo sentido», contesta sobre si alguna vez se imagino saliendo con una mujer como Celeste Cid, y explica: «Por eso estoy haciendo una serie que la actuó, la dirijo y la escribo. O sea, no sé, me parece que si hay algo que enseña todo esto es que no hay límites».
Además, da algunos detalles de su viaje a Grecia. «Nos divertimos y hasta nos caímos de la moto», cuenta con un tostado atípico para julio.
Apenas bajó del avión se metió en un rally de notas. El encuentro con Revista GENTE es la primera entrevista: está solo a una semana del estreno de la segunda temporada de la serie que cambió su vida: División Palermo, y lo sabe.
Todo lo que tenés que saber de División Palermo 2

Después de convertirse en un fenómeno inesperado en Netflix, División Palermo regresa con una segunda temporada que redobla la apuesta. Con más acción, más sátira y más incomodidad, la serie creada y protagonizada por Santiago Korovsky retoma la historia del grupo de la guardia urbana inclusiva que, entre torpezas y convicciones, se mete sin querer en el fuego cruzado de un ajuste de cuentas narco. El tono, esa mezcla entre humor absurdo, crítica social y costumbrismo argentino es la marca registrada.
La sinopsis adelanta de qué irá la cosa. La trama arranca poco después del tiroteo del final de la primera temporada. El Ranger (Alan Sabbagh), líder de la banda criminal, sobrevive y vuelve con sed de venganza. Mientras tanto, Fede (Korovsky) intenta sostener un equipo cada vez más caótico, entre nuevas incorporaciones y dramas personales. María Elena (Pilar Gamboa), Nacho (Martín Garabal) y Gómez (Marcelo Subiotto) también están de vuelta, cada uno con un poco más de historia propia y un poco menos de paciencia… Ah, y a no perderse las nuevas incorporaciones.
Video: Martina Cretella.