La China Suárez volvió a ser el centro de todas las miradas tras publicar una serie de postales desde Turquía junto a sus tres hijos, Rufina, Magnolia y Amancio. Bajo el título “Istanbul con amor”, la actriz compartió imágenes de su recorrido por emblemáticos puntos turísticos de Estambul, ciudad en la que reside su pareja, el futbolista Mauro Icardi.
Lo que más llamó la atención de los seguidores fue que tanto ella como sus hijas lucieron atuendos típicos de la cultura musulmana, es decir, quienes practican la religión islámica: todas se cubrieron el cabello con pañuelos, y las niñas vistieron túnicas en tonos claros con delicados volados. Si bien se interpreta que este gesto podría responder a un código de vestimenta obligatorio para ingresar a determinados templos, como Santa Sofía —monumento que aparece claramente en algunas de las imágenes—, el hecho de haber compartido esas postales en este preciso momento avivó las especulaciones.
El viaje se da justo cuando crecen los rumores sobre una posible mudanza definitiva de los niños a Turquía, lo que generaría un gran cambio en la vida familiar: especialmente por la distancia que los separaría de sus padres, Nicolás Cabré y Benjamín Vicuña, quienes residen en la Argentina. Aunque ni la China ni Icardi se pronunciaron sobre una posible reubicación permanente, el tono del posteo y la naturalidad con la que sus hijos aparecen adaptándose al contexto local refuerzan la idea de una nueva etapa más establecida en Estambul.
La galería publicada muestra, además, a los chicos admirando la arquitectura de los templos y compartiendo un momento familiar íntimo en la Cisterna Basílica, una de las atracciones más visitadas de la ciudad. Las imágenes transmiten paz, conexión y una fuerte integración cultural, lo que también fue destacado por los seguidores en redes sociales.
Mientras tanto, en el plano mediático local, la visita de Suárez a Turquía y las implicancias que podría tener en su vínculo con los padres de sus hijos volvió a instalarse en los programas de espectáculos. El silencio de la actriz ante estas versiones no hizo más que alimentar las especulaciones.
Por lo pronto, las fotos desde Estambul muestran a una familia disfrutando un viaje lleno de historia, afecto y símbolos que despiertan interpretaciones. En un gesto que podría ser una simple postal turística o una señal más profunda, La China vuelve a dar de qué hablar con cada paso que da.
