El diputado nacional Alejandro Finocchiaro, interventor del PRO en Tucumán, se refirió a los desafíos políticos del país y destacó la importancia de reconstruir la calidad institucional para atraer inversiones extranjeras y consolidar un proyecto de centro derecha que ofrezca una alternativa al populismo.
En diálogo con LA GACETA, Finocchiaro enfatizó que “mejorar la calidad institucional” es clave para generar confianza y crear un entorno propicio para las inversiones. Según el diputado, esta estrategia permitiría fortalecer la economía y proyectar una Argentina con reglas claras y estables. Además, reafirmó su apuesta por un proyecto político que fomente el diálogo y la cooperación, pero también destacó la disposición del PRO para avanzar en solitario si no se alcanzan consensos amplios.
Otro tema destacado fue el debate sobre la posible eliminación de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Finocchiaro no dudó en calificarlas como “una porquería”, argumentando que representan un gasto innecesario para la sociedad argentina y que, en muchos casos, no garantizan una competencia interna real. Propuso que, de derogarse, sea después de las próximas elecciones, para permitir a los partidos reorganizarse y volver al sistema en el que las candidaturas se definían por las cartas orgánicas partidarias.
El interventor del PRO destacó la relevancia de Mauricio Macri dentro del partido y aseguró que el ex presidente está “con muchas ganas de volver a liderar”. Enfatizó que la visión de Macri sigue siendo clave para consolidar un espacio que se define como “resistencia al populismo”. Definió al PRO como un partido cuyo ADN está en esta resistencia, y abrió el diálogo con el oficialismo de La Libertad Avanza. “Queremos sentarnos y construir un proyecto de país con ustedes, pero también podemos hacerlo solos”, concluyó.
Finalmente, el diputado también abordó las tensiones dentro del PRO, en particular por la crisis entre Patricia Bullrich y Macri. Destacó la importancia de mantener la unidad interna, pero dejó en claro que no se aceptarán coaliciones que desvirtúen la esencia del partido. “El PRO no tiene adjetivos, cualquiera que quiere utilizar el nombre de pila PRO con un apellido diferente, no pertenece a la realidad orgánica del partido. “Nuestro ADN está en la resistencia al populismo”, completó.
También se refirió a la situación de los radicales expulsados del partido por colaborar con el Gobierno de Milei; entre ellos, el diputado tucumano Mariano Campero. “Yo los quiero a todos dentro del PRO”, lanzó.
