El plan oficial para reducir la estructura operativa de Aerolíneas Argentinas sigue adelante y la gestión que encabeza Javier Milei continúa aminorando la presencia física de la estatal en el sur y el centro del país. En esa línea, la línea de bandera desactivará por completo sus oficinas en Bariloche en el transcurso de este mes, y la compañía viene de cerrar su punto de ventas y atención en Comodoro Rivadavia. Al mismo tiempo, la empresa bajo las persianas a su local en Rosario y se prepara para aplicar una medida similar a su representación en Santa Fe capital. La línea de bandera atraviesa otra instancia de turbulencia interna a partir de la probable reincorporación de Pablo Biró al directorio de la firma, expulsado en octubre de 2024 acusado de operar en contra de los intereses de Aerolíneas Argentinas.
El cierre establecido para la sucursal de la compañía en Bariloche sigue a la desactivación de las oficinas de la estatal en Ushuaia y El Calafate. En el caso de la ciudad rionegrina, aún se desconoce qué ocurrirá con el inmueble donde funciona la representación de la línea de bandera, propiedad de Aerolíneas Argentinas.
Dada esta decisión de la compañía, los servicios de atención al público y comercialización de tickets quedarán sujetos únicamente a los canales online y telefónicos de la estatal. Con relación a los empleados de la firma en Bariloche, se especula con que serán destinados al área de operaciones de Aerolíneas Argentinas en el aeropuerto de esa ciudad.
En el caso de Comodoro Rivadavia, la compañía ya había frenado por completo la atención al público en octubre del año pasado por falta de personal. La compañía concluyó el capítulo laboral mediante su programa de retiros voluntarios.
Al igual que en lo concerniente a Bariloche, la firma informó, mediante un breve escrito colocado en el ex local de la aérea en la ciudad chubutense, que «para consultas y reservas comunicarse a nuestro centro de atención telefónica».
Previo a Bariloche y Comodoro Rivadavia, Aerolíneas Argentinas desactivó su oficina en Rosario a fines de enero y también concentró su personal en el aeropuerto local. En dicha ciudad santafesina la compañía optó por no renovar el contrato de alquiler de la oficina que operaba en el centro rosarino.
En esa provincia, la estatal también avanzaría con el cierre de su representación en Santa Fe capital. En el ámbito aerocomercial señalan que esa medida se haría efectiva en el transcurso de este mes.
Aerolíneas Argentinas: más tensión con Pablo Biró
En simultáneo a estos movimientos, la línea de bandera atraviesa otra instancia de turbulencia interna tras conocerse que Pablo Biró, el controvertido líder de los pilotos nucleados en el gremio APLA, buscaría retornar al directorio de Aerolíneas Argentinas.
El gremialista fue expulsado en octubre de 2024 acusado de operar contra la estatal a través de medidas de fuerza recurrentes y acciones que perjudicaron a miles de pasajeros.
En octubre del año pasado, la empresa emitió un comunicado exponiendo las razones que motivaron la remoción del titular de APLA.
«A pedido del principal accionista de Aerolíneas Argentinas, el Estado nacional, los miembros de la asamblea de accionistas votaron a favor de la expulsión de Pablo Biró del Directorio de la empresa por haber actuado recurrentemente en forma desleal y contra los intereses de la compañía que representa«, informó la estatal en ese momento.
«Pablo Biró, en su doble rol de dirigente del gremio APLA (pilotos), y como director de la compañía por las acciones clase B del Programa de Propiedad Participada, tuvo durante estos últimos meses un comportamiento contrario al esperable de un miembro del directorio de Aerolíneas Argentinas. Tan solo este año, Biró participó y promovió 13 medidas de fuerza contra la aerolínea, muchas de ellas escudadas en supuestas ‘asambleas informativas’ que en realidad eran paros encubiertos», agregó.
Desde la cúpula de la estatal se anticipó que se ejecutarán medidas para rechazar este potencial retorno de Biró.
«La designación del Sr. Biro como Director fue realizado en un acto del PPP (Programa de Propiedad Participada) que carece de formalidad ante Aerolíneas Argentinas. No existiendo acto formal de designación del Sr. Biró que cumpla con lo requerido por la Ley General de Sociedades, esa designación no es válida para ARSA«, se expuso desde la aérea.
«Más allá de la forma, la compañía va a hacer todo lo que esté a su alcance para evitar que una persona que actuó manifiestamente contra los intereses de la empresa, soportada por el esfuerzo de todos los contribuyentes, sea parte del directorio de la misma», añadieron las fuentes.
Aerolíneas Argentinas y una privatización que no avanza
Por otra parte, la privatización de Aerolíneas Argentinas se mantiene en la instancia de la indefinición por falta de candidatos y el horizonte cercano de la línea de bandera se hace cada vez más difícil de determinar.
Grupo Abra, integrado por Gol y Avianca, acaba de informar a través de su CEO, Celso Ferrer, que la compra de la línea de bandera no está dentro de sus planes comerciales. Por el contrario, ambas aéreas prevén intensificar la alianza comercial con Aerolíneas Argentinas pero sin efectuar ningún tipo de avance en términos de toma de control de la empresa.
La ausencia de interés por parte de Grupo Abra se suma a lo ya comunicado por Azul y LATAM, quienes durante el segundo semestre de 2024 se bajaron de cualquier potencial compulsa por la estatal.
Desde Grupo Abra se indicó que la apuesta inmediata de Gol y Avianca pasará por acentuar el vínculo comercial con Aerolíneas Argentinas pero sin intervenir en el control accionario de la línea de bandera.